Cuando uno se convence de que, al enamorarse, resulta tremendamente vulnerable, la idea de haber vivido hasta entonces desconocedor de esta verdad le hace estremecerse. Por esta razón, el amor vuelve virtuosas a ciertas personas.
Yukio Mishima
Si extiendo una mano encuentro una puerta.
Aldo Pellegrini
Contra España y los españoles no tenemos nada en contra. A los españoles les queremos como amigos, no como amos.
Alfred Bosch
Y aunque a pares tengo ojos, tengo oídos, sin ti pierden sentido el sonido y el color.
Amaia Montero
Tres cuartas partes de las personas con las que se reunirá mañana, tienen hambre y sed de simpatía.
Dale Carnegie
La tierra volverá a quienes la trabajan con sus manos.
Emiliano Zapata
Salid y desafiad la opinión, id contra este cautiverio vegetal de la sangre. Id contra todas las clases de manos muertas.
Ezra Pound
Meditar es cultivar nuevas cualidades y cultivar nuevas formas de ser.
Jon Kabat-Zinn
La evolución de la inteligencia social, al menos en Occidente, ha puesto en la cima de los valores la autonomía, la libertad, la realización personal.
José Antonio Marina
Las almas sencillas y sinceras nunca se engañan más que a medias.
Joseph Joubert
A quince metros del cadáver ya no necesité guía alguno. Había detectado la inconfundible fetidez a muerte que se mezclaba con el peculiar olor arcilloso de los bosques. El olor a carne en descomposición no se asemeja a ningún otro y se percibía claramente en el ambiente cálido del atardecer, tenue pero innegable.
Kathy Reichs
El talento es un don que Dios nos ha dado en secreto y que nosotros revelamos sin darnos cuenta.
Montesquieu
La soledad no significa estar solo.
Noël Coward
Abre tu alma y tu oído al son de mi mandolina: para ti he hecho, para ti, esta canción cruel y zalamera.
Paul Verlaine
El poder que te creó a ti, también creó el mundo. Si puede cuidarte a ti, también puede cuidar el mundo. Si Dios creó el mundo, es asunto de Él hacerse cargo del mundo, no tuyo.
Ramana Maharshi
En el campo de las creencias religiosas la Reforma introdujo cambios profundos. La Biblia adquirió entonces una autoridad nueva y de mayor alcance. La generación anterior consideraba que las Sagradas Escrituras eran peligrosas en manos de personas iletradas y debieran ser leídas sólo por sacerdotes.
Winston Churchill