El lenguaje militar emplea los términos de "Samurái ilustrado" y de "Samurái ignorante". Un Samurái que ha esperado tenerse que enfrentar con situaciones difíciles para aprender a salir de ellas no es ilustrado. Un Samurái que se preocupa por adelantado de todas las situaciones y soluciones posibles, es sabio. Será por lo tanto capaz de hacerle frente con brillantez cuando la ocasión se presente. No importa lo que ocurra, un Samurái ilustrado es aquel que se preocupa de los detalles de la acción, antes de la hora.