Recuerdo a los profesores de nuestra escuela pública. Teníamos un dicho: Los que no saben enseñan, y los que saben enseñar dan clases de gimnasia. Y, claro está, los que no sabían nada de nada, venían a enseñar a nuestra escuela.
Woody Allen
Todo se cambia, todo se transforma: la verdad, la mentira, los despojos.
Alfonso Orantes
Todo cuanto de desagradable puede echaros en cara vuestro enemigo, nunca llegara a la mitad de lo que a vuestras espaldas murmuran de vosotros los amigos.
Alfred de Musset
Yo no entiendo por qué me importa tanto un hombre cuando existen tantas cosas mejores a mano.
Amy Winehouse
Lo que diga mi dedito.
Capulina
El orgullo se resarce siempre y no pierde nada, incluso cuando renuncia a la vanidad.
François de La Rochefoucauld
La consciencia de la vanidad es un poderoso desinfectante: llena la religión, como llena la vida, de fortaleza, dignidad y benevolencia.
George Santayana
El hombre puede ser un escéptico sistemático; pero entonces no puede ser ya ninguna otra cosa; y ciertamente tampoco un defensor del escepticismo sistemático.
Gilbert Keith Chesterton
De vez en cuando me encuentro con un joven en el que no desearia ver nada cambiado ni mejorado; sólo me preocupa que haya tantos perfectamente dispuestos a nadar con la corriente de su época...
Goethe
En el trabajo olvido mis sufrimientos... ¡El trabajo es mi salvación!
Honoré de Balzac
La virtud es su propia recompensa.
John Dryden
El genio es un rayo cuyo trueno se prolonga durante siglos.
Knut Hamsun
Todo ser que haya vivido la aventura humana, vive en mí.
Marguerite Yourcenar
Cuando juego con mi gata ¿quién sabe si ella no me hace más deportista a mí que yo a ella?
Michel de Montaigne
El director me dijo que tenía que convertirme en un modelo para los estudiantes y que debía, por tanto, comportarme en consonancia. También me dijo que un verdadero pedagogo es aquel que no solo imparte conocimientos sino que ejerce una influencia moral positiva en sus alumnos.
Natsume Sōseki
Por razones morales soy un ateo, por razones morales. Usted le reconoce a un creador su creación y preparar el mundo para ello, yo prefiero no seguir ese camino creado por alguien que cree que otro lo creo.
Stanisław Lem