¡Oh, tú, invisible espíritu del vino, si no tienes otro nombre con el que puedas ser convencido, deja que te llamemos demonio!
William Shakespeare
Mis problemas no los tengo en las escenas de masas sino en las otras, las que a primera vista parecen simples. Aquí es donde surgen los obstáculos realmente insuperables.
Andréi Tarkovski
Lo que no está claro no es francés.
Antoine de Rivarol
Si queremos un mundo de paz y de justicia hay que poner decididamente la inteligencia al servicio del amor.
Antoine de Saint-Exupéry
Para el alma, la religión constituye un consenso normal exactamente igual al de la salud para el cuerpo.
Auguste Comte
Si no hay café para todos, no habrá para nadie.
Che Guevara
Quien puede forzarnos al bien, también podría forzarnos al mal. Un primer déspota justo, enérgico y esclarecido, es una desgracia; un segundo déspota justo, enérgico y esclarecido es una desgracia mayor; un tercero que se pareciera a los dos primeros, al hacer olvidar a los pueblos sus privilegios consumaría su esclavitud.
Denis Diderot
Permanece junto a quien te dé respuestas y no problemas. Quien te ofrezca seguridad y no temor, confianza y no dudas. Alguien maduro y honesto.
Ignacio Novo Bueno
Justicia: una vez que se ha pronunciado esa palabra, ¿hasta dónde nos conducirá? Más fácil es gritar ¡No! Más fácil es ser apaleado y convertido en mártir.
J. M. Coetzee
No juzguéis a los demás si no queréis ser juzgados. Porque con el mismo juicio que juzgareis habéis de ser juzgados, y con la misma medida que midiereis, seréis medidos vosotros.
Jesús de Nazaret
Yo quiero al hermano argentino, yo amo al boliviano, yo adoro al peruano y si alguien tiene algún problema con eso, bien puede lamerme el ano.
Jorge González
Pero eso que generalmente se llama bello no es más que una sublimación de las realidades de la vida.
Junichiro Tanizaki
Qué se puede esperar de un burro mas que una patada.
Moria Casán
Siempre somos los mismos, el resto es casting.
Descubrir la energía interior y entregarla para renovar el mundo; he aquí el altruismo.
Rafael Barrett
Después de todo, el sueño es la prefiguración de la muerte.
Silvina Ocampo