La dulce piedad es el símbolo de la verdadera grandeza.
William Shakespeare
Querido Daniel, cuanto antes usted se de cuenta de esto, mejor: Nada en esta cochina vida vale dos duros si no tienes alguien con quien compartirlo.
Carlos Ruiz Zafón
No se pierde el tiempo que se emplea en procurar hacer el bien.
Concepción Arenal
No existe nada en la mente que no haya estado antes en los sentidos, es decir, todo lo que tenemos en nuestra mente, ha entrado en nuestra conciencia a través de los sentidos, y es nuestra razón innata la que ordena todas nuestras sensaciones en distintos grupos y clases.
Francisco Clavero Valdivielso
El destino no reina sin la complicidad secreta del instinto y de la voluntad.
Giovanni Papini
La diplomacia substituye a la fuerza.
Hippolyte Taine
Cuando escribo, lo único que sé es que sufro de dolor, de esperanza, de alegría; sé que estoy sufriendo y que necesito decirlo.
Jaime Sabines
Sufro derrames cerebrales todas las semanas.
Kase.O
La pluma es tan herramienta como el azadón, el escoplo o el badilejo; y si el obrero gasta la fuerza del músculo, el escritor consume la energía del cerebro.
Manuel González Prada
Yo me quedaré en pie, porque vivo al revés...
Manuel Moretti
Los sentimientos son inocentes como las armas blancas.
Mario Benedetti
¡Clava en tu carne tu hueso y echa a morder en el aire, que Dios no quiere contigo sino errar adivinándote!
Martín Adán
La palabra es mitad de quien la pronuncia, mitad de quien la escucha.
Montesquieu
Querida Sra. Chown, ignore los intentos de su hijo de enseñarle Física. No es la cosa más importante. La cosa más importante es el amor. Mis mejores deseos, Richard Feynman.
Richard Feynman
Cuando uno deja de crecer empieza a morir.
William Burroughs
Hay que defender la paz a todo trance, incluso con la guerra.
Woodrow Wilson