Un apodo es la más dura piedra que el diablo puede arrojar contra un hombre.
William Hazlitt
Cada día sabemos más y entendemos menos.
Albert Einstein
Una sonrisa es la semilla que crece en el corazón y florece en los labios.
Anónimo
Está claro, a la vez, que no existe lugar ni vacío ni tiempo fuera del primer cielo.
Aristóteles
La importancia del amor para siempre. La permanencia del gozo. A partir de la comprensión. El significado de la vida que se comparte.
Daniel Sada
Los malvados obedecen a sus pasiones, como los esclavos a sus dueños.
Diógenes
Es más fácil tejer una corona, que encontrar una cabeza digna de ella.
Goethe
En la primavera de la vida, hasta las espinas florecen y hasta las penas tienen un sabor de felicidad.
Ignacio Manuel Altamirano
En la vida sólo hay cuatro cuestiones importantes: qué es sagrado, de qué está hecho el espíritu, para qué vale la pena vivir, y para qué vale la pena morir. Sólo existe una respuesta: el amor.
Johnny Depp
Conversación con Iker Casillas.
José Mourinho
Todas las cosas de este mundo no son más que tierra. - Ponlas en un montón bajo tus pies, y estarás más cerca del cielo.
Josemaría Escrivá de Balaguer
He usado del derecho del novelista al tomarme unas cuantas libertades indispensables respecto de la historia contemporánea de Medio Oriente y de la estructura del personal en el servicio diplomático británico. También he mejorado la belleza de la plaza Trafalgar, añadiéndole unos cuantos olmos.
Lawrence Durrell
El hombre que se lanza a la contienda pública y osadamente se expone a la luz meridiana en calles y plazas, no debe lamentarse ni protestar al verse examinado con microscopio y descrito en sus más minuciosos rasgos intelectuales, morales y físicos: sube al escenario, y todos adquieren derecho de aplaudirle o silbarle.
Manuel González Prada
Debes aprender mientras dure tu ignorancia; si creemos al dicho, mientras dure tu vida.
Séneca
Nadie tuvo tan propicios a los dioses que pudiera prometerse un mañana.
Existe la raza de aquellos que no llegan a las palabras más que movidos por sus emociones, y la raza de los que no llegan a las emociones más que movidos por las palabras.
Victoria Ocampo