La coneja quisiera que todo fuese negro, y el búho que todo fuese blanco.
William Blake
Yo no soy chulita, asi que ten mucho cuidado, vale?
Belen Esteban
Matamos a los malos y trajimos a los dirigentes a la mesa de negociaciones. Así es como funciona el mundo.
Bradley Cooper
La mujer domina con súplicas; el hombre, con órdenes: la una, si quiere; el otro, si puede.
Johann Christoph Rost
Ningún tirano haría progresos si no hubieren malvados que conducidos por el egoísmo y arrastrados por el torrente de la pasiones antisociales, no sirviesen de apoyo al trono erigido por los déspotas entre las ruinas de la virtud y derechos más augustos del hombre.
Juan José Castelli
Eres el Número Uno. (a Ayrton Senna)
Juan Manuel Fangio
Dios es modesto, no se atreve a vanagloriarse de haber creado el mundo.
Jules Renard
El carácter de los retratos ha cambiado con el tiempo. La armonía clásica entre la cara y el corazón fue reemplazada poco a poco por la expresión discordante de la individualidad.
Kōbō Abe
Resulta, por ejemplo, que los amigos del pueblo pueden, por sí solos, arreglarlo todo. Los obreros pueden estar tranquilos.
Lenin
El joven conoce las reglas, pero el viejo las excepciones.
Oliver Wendell Holmes
Dios puede que no juega a los dados con el universo, pero algo extraño está pasando con los números primos.
Paul Erdős
Al menos que se haga un compromiso, solo hay promesas y esperanzas, pero no planes.
Peter F. Drucker
No sé cómo había gente dispuesta a trabajar para él. Cuando se mudaron a la avenida Central, lo primero que pidió a los operarios de mudanzas fue que instalaran su escritorio, y el primer lugar donde lo quiso no fue el despacho rodeado por paneles de vidrio sino el mismo centro de la planta de fabricación, de modo que pudiera vigilar a todo el mundo.
Philip Roth
El campamento es con mucho la mejor escuela para dar a los muchachos las cualidades de carácter.
Robert Baden-Powell
La pobreza y la enfermedad cambian de forma sorprendente el valor de los sentimientos y de las complicaciones emocionales.
Sándor Márai
Si tiene solución, entonces no hay de qué preocuparse; si no tiene solución, no tiene caso lamentarse.
Shantideva