Una lengua afilada es la única herramienta que se aguza con el constante uso.
Washington Irving
¡He ahí el mundo! Cada uno se imagina que está por encima de su vecino.
Alain-René Lesage
Me rebelo, luego somos.
Albert Camus
Y, ¿Con qué aliciente? La gloria. ¡Oh! ¡La gloria, que casi siempre arroja sus laureles sobre el ataúd, donde han caído derribadas por el hambre del cuerpo ó los supremos dolores del alma! No importa. Con la planta herida por los abrojos del camino y la frente iluminada por los resplandores de la fe en los destinos humanos, ellas las obreras del pensamiento, continuarán laborando.
Clorinda Matto de Turner
No sé quién es mejor, pero yo soy más grande. (tamaño, estatura)
Cristiano Ronaldo
Escoger el propio tiempo es ganar tiempo.
Francis Bacon
La naturaleza exterior nos avergüenza: es de una serenidad desoladora para nuestro orgullo.
Gustave Flaubert
No perdamos nada de nuestro tiempo; quizás los hubo más bellos, pero este es el nuestro.
Jean-Paul Sartre
Mi madre solía decir que yo era un soñador obstinado. Me hice mayor y tuve algunos sueños, entre ellos el sueño del progreso, de un mundo mejor. Ahora casi sólo hay un progreso con el que sueño: que los políticos y los curas no nos den miedo, sino risa.
Karlheinz Deschner
La juventud no debe sólo asimilar los frutos de la cultura de sus padres, sino que debe elevar la cultura a nuevas cimas, a las que no llegan las gentes de las anteriores generaciones.
Konstantin Stanislavski
El comunista nunca debe creerse infalible ni comportarse en forma altanera, pensando que sobresale en todo mientras los demás no tienen nada bueno; jamás debe encerrarse en su pequeña habitación, ni fanfarronear, ni actuar como tiranuelo.
Mao Zedong
No, no, repito, la castidad no es una virtud, no es más que una convención que tuvo su origen en un refinamiento del libertinaje.
Marqués de Sade
Los hombres no dejar de jugar porque envejecen, sino que envejecen, porque dejar de jugar.
Oliver Wendell Holmes
... nadie es justo de grado, sino por fuerza...
Platón
Reinar sobre sí mismo es el reinado más glorioso.
Séneca
La risa no es más que la gloria que nace de nuestra superioridad.
Thomas Hobbes