¡En qué poca cosa se convierten los reyes de la creación bajo un acceso de fiebre o un ataque de bilis!
Walter Scott
Aun pido enseñanza; pero ya no al hombre, sino a quien no recibe enseñanza del hombre.
Antonio Porchia
Todos los hombres tienen naturalmente el deseo de saber. El placer que nos causan las percepciones de nuestros sentidos son una prueba de esta verdad.
Aristóteles
No soy primariamente una defensora del capitalismo, sino del egoísmo; y no soy primariamente una defensora del egoísmo, sino de la razón. Si uno reconoce la primacía de la razón y la aplica consistentemente, todo lo demás viene por descontado. Esto, la supremacía de la razón, era, es y será el principal interés de mi trabajo, y la esencia del objetivismo.
Ayn Rand
También yo mataría, incluso a ti: me haces soñar sin tregua, no me dejas dormir.
Clara Janés
¡Ah, qué caliente la piel de una mujer, la piel que esconde!
Den Sute-jo
Es Cristo quien ha devuelto definitivamente al hombre la libertad, la dignidad y el sentido de su existencia en el mundo, sentido que había perdido en gran medida a causa del pecado y del paganismo que le rodea.
Francisco Fernández-Carvajal
Yo no llamo malvado propiamente al que peca, sino al que peca o pecaría sin sentir remordimiento.
Giacomo Leopardi
¡Ay, amor! Cuando tú te has adueñado de nosotros, muy bien podemos decir: Adiós, prudencia.
Jean de La Fontaine
Cuando en vez de sustituir las imágenes por las ideas, sustituimos las ideas por las imágenes, embrollamos el tema, oscurecemos su materia, volvemos menos clarividente el espíritu de los otros y también el nuestro.
Joseph Joubert
Tengo dos cosas: cerebro y pelotas. Y no prescindiría ninguna de las dos por nadie.
Julian Casablancas
El mundo no es un complejo de formas acabadas, sino de procesos.
Karl Marx
No es que me opongo al matrimonio; Pero me parece que un hombre y una mujer son las personas menos adecuadas para casarse.
Massimo Troisi
A veces yo soy Dios, si digo que un hombre muere, muere el mismo día.
Pablo Escobar
¿Qué será de mí? En ese instante, sobre el alma, el cuerpo me pesaba como un traje demasiado grande y mojado.
Roberto Arlt
Todos estamos locos. Si no fuera por el hecho de cada uno de nosotros es un poco anormal, no habría ningún punto en dar a cada persona un nombre distinto.
Ugo Betti