Si se puede soñar, se puede lograr.
Walt Disney
La gente ya no escucha discos, no los conoce realmente.
Andrés Calamaro
La Biblia no dice qué dieta siguió Noé para llegar al Diluvio con seiscientos años de edad, ni cuál fue el método que usó la mujer de Abraham para quedar embarazada a los noventa, ni aclara si sabía hablar en hebreo la burra de Balaam, que discutía con su amo.
Eduardo Galeano
Respetad la opinión ajena, y creed que en este mundo nadie posee el tesoro de la verdad.
Ernest Renan
¡Si vuelvo la mirada melancólicamente a la niñez, es porque tenía madre! Es eso, es nada más que eso ser niño: tener padres; ser completamente hijo...
Gabriel Miró
... algunos casquivanos o majaderos se divierten y complacen en fingir familiaridad con el vulgo para hacerle sentir después su desprecio de manera asertiva.
Goethe
Los animales más insignificantes tienen el derecho de considerarse completos, pero nosotros los hombres nos pasamos la vida pensando que no somos más que un esbozo, y el solo hecho de considerarnos unos a otros equivale ya a una mala acción.
Hans Carossa
No tengas ambición personal, y así to consolarás de vivir o de morir venga lo que viniere.
Henri-Frédéric Amiel
Dios, dicen, está en todas partes. No tiene gran mérito: la coca-cola también.
Jaume Perich
Tú ya sabes lo que es la vanidad: el deseo de elogios y aplausos, hasta de los locos.
Leonid Andréiev
La vejez pone más arrugas en el espíritu que en la cara.
Michel de Montaigne
Un hombre sabio será el dueño de su mente. Un tonto será su esclavo.
Publilio Siro
Estimule a sus colaboradores y tendrá participación en la compañía.
Sam Walton
Hasta de males hay ambición.
Séneca
La ciencia nos obliga absolutamente a creer con perfecta confianza en un Poder Directivo... en una influencia aparte de las fuerzas físicas, dinámicas o eléctricas... La ciencia nos obliga a creer en Dios.
William Thomson
Emperador a Mozart: Es demasiado hermosa para nuestros oídos, verdaderamente encuentro que hay demasiadas notas. A lo que el compositor repuso: Exactamente no hay más que las necesarias.
Wolfgang Amadeus Mozart