Visto por los dioses de otro modo.
Virgilio
En ausencia de una responsabilidad rigurosa, florece la incompetencia. Se fomenta y se recompensa la falta de honradez.
Al Gore
La importancia de los repúblicos ha de medirse por el odio de sus adversarios, y no por el amor de sus amigos.
Cándido Nocedal
El tranvía, la calle, el uniforme del colegio se transforman, son olas de cariño que te envuelven.
Carlos Drummond de Andrade
Estoy de todo menos bien. Tengo la sensación de que el sol se ha puesto y no ha salido durante cinco días, Ana. Vivo en una noche perpetua.
E. L. James
Lo único que nos brinda el mar son golpes duros y, a veces, la posibilidad de sentirnos fuertes.
Emile Hirsch
Dios es un vertebrado gaseoso.
Ernst Haeckel
Sé ganar, pero también sé perder. Ha sido un día más de mi vida, del que voy a aprender mucho. Hoy todo ha ido perfecto, pero desafortunadamente no ha sido suficiente. Durante el campeonato hemos tenido altos y bajos, y hemos pagado por estos últimos. Y pese a todo, creo que todos en el equipo han trabajado muy bien. Debemos estar muy contentos con el título de Constructores que hemos ganado.
Felipe Massa
La lengua es pues por así decir, el espacio social de las ideas.
Gabriel Tarde
Todos aquellos que tienen juicio natural juzgan que las leyes son buenas porque tienen por finalidad la conducta y comparativamente son mejores aquellas que dan más ocasión para una mejor conducta, porque de las leyes todas unas han sido dadas por nosotros, otras ideadas por los hombres, sobre todo para mayor comodidad de la vida humana.
Giordano Bruno
A los grandes, el culo. A los pequeños, porrrr el culo.
José María García
Dueña de la negra toca, por un beso de tu boca diera un reino Boabdil; y yo por ello, cristiana, te diera de buena gana mil cielos, si fueran mil.
José Zorrilla
¿Para qué hacer sufrir a un hombre casándote con él cuando se puede hacer felices a muchos?
Mae West
¿Cabe don más valioso que el pensamiento? Al dar el corazón a los seres que nos aman, les pagamos una deuda; al ofrecer el pensamiento a los desconocidos, a los adversarios, a nuestros mismos aborrecedores, imitamos la inagotable liberalidad de la Naturaleza que prodiga sus bienes al santo y al pecador, a la paloma y al gavilán, al cordero y al lobo.
Manuel González Prada
La necesidad de señalar el desorden ajeno suele ser una señal de que estás descuidando el orden de tu propio espacio. Por eso debes empezar por eliminar tus propias cosas.
Marie Kondo
Viven más contentos aquellos en quienes jamás puso los ojos la fortuna, que los otros de quienes los apartó.
Séneca