Ven mi corazón, Ven a escuchar este secreto escondido en una canción llorando.
Vinicius de Moraes
Hay ignorantes que quieren combatir por todos los medios el empleo de la Filosofía, y sobre todo entre los predicadores, donde nadie les resiste, bestias brutas que blasfeman lo que ignoran.
Alberto Magno
En la hospitalidad la buena voluntad es la que más vale.
Anónimo
Un país de pícaros y ladrones, desde las más altas instancias del Estado hasta el concejal más inútil de cualquier pueblo perdido de la geografía española.
Armando Rodera
..., una vez destruido el Estado de los hebreos, la religión revelada dejó de tener fuerza de derecho.
Baruch Spinoza
Si amas la vida, no pierdas el tiempo, de tiempo esta hecha la vida.
Bruce Lee
Una guerra no se ganaba el día de la batalla. Cada provincia tenía su propio carácter, y en cada una de ellas se daban las apariencias y la realidad. Incluso una provincia que pareciera superficialmente débil podía tener una fuerza oculta.
Eiji Yoshikawa
Si a veces empleaba locuciones que parecen triviales, lo hacía con el fin de ser perfectamente comprendido de las masas, de las clases del pueblo, y descendía por decirlo así, abandonando las pretensiones literarias con la mira de ilustrar el espíritu del pueblo.
Francisco Zarco
En el gran ejército de las letras, los críticos son los centinelas, apostados en los rincones de periódicos y revistas, para echar el alto a todo autor novel.
Henry Wadsworth Longfellow
La superstición prueba que, por ignorante que sea, el hombre siente en él un alma inmortal que aspira a lo desconocido de la vida futura.
Herman Melville
Puestos a desangrarnos tú contra yo, ¿por qué no hacemos las paces?
Joaquín Sabina
Porque vos sabes, sigue dentro de mi cabeza, ¿sabes qué es? Es...
Luca Prodan
Las mujeres nos aman por nuestros defectos. Si tenemos los suficientes nos lo perdonan todo, incluida la inteligencia.
Oscar Wilde
El lugar para mejorar el mundo por primera vez es el propio corazón, la cabeza y las manos.
Robert Pirsig
El que disputa con un beodo, disputa con un hombre ausente.
Séneca
Ocuparse de las matemáticas es, digo, es el mejor remedio contra la concupiscencia.
Thomas Mann
