La mar es la inexorable noche social en que la penalidad arroja a sus condenados. La mar es la inmensa miseria. El alma, naufragando en este abismo, puede convertirse en un cadáver. ¿Quién lo resucitará?
Victor Hugo
Nuestros problemas agudizan nuestros ojos a veces.
Agatha Christie
Margaret Thatcher en lugar de desodorante utiliza tres en uno.
Alfonso Guerra
Aunque todo el mundo te odiase, mientras tu conciencia estuviese tranquila, nunca, créelo, te faltarían amigos.
Charlotte Brontë
Se puede quitar a un general su ejército, pero no a un hombre su voluntad.
Confucio
Sólo la renovación puede mantener, el que se queda parado, se retrasa.
Everhardus Johannes Potgieter
La libertad viene de adentro.
Frank Lloyd Wright
Un hombre y una mujer son hasta tal punto la misma cosa que casi no se entiende la cantidad de distinciones y de razonamientos sutiles de los cuales se nutre la sociedad sobre este argumento.
George Sand
El tiempo que se da para el disfrute nunca es perdido.
Giacomo Casanova
No tenía ganas de nada. Sólo de vivir.
Juan Rulfo
La fortuna es de los valientes.
María Dueñas
La felicidad es conforme al amor.
Roger Garaudy
Me paso el día entero diciendo que estoy encantado de haberlas conocido a personas que me importan un comino. Pero supongo que si uno quiere seguir viviendo, tiene que decir tonterías de ésas.
Salinger
Señor, sabemos que no hay otro orden, solo aquel que creamos, no hay más esperanza que nosotros, no hay más piedad que nosotros, no hay justicia, solo nosotros. Todas las cosas que son, son nuestras, pero tienen que importarnos, porque, si no nos importa nada, no existimos.
Terry Pratchett
Una novela es una máquina de generar interpretaciones.
Umberto Eco
Llegué a Nueva York por un milagro, cuando tenía trece años me escapé. Mi padre iba a casarme con un viejo de sesenta años porque le daba cinco camellos. Yo era especial, rebelde. Las niñas son educadas para trabajar y ser ofrecidas en matrimonio. Eso quieren los padres para sus hijas.
Waris Dirie