En un libro habla el entendimiento; en la fisonomía se revela el alma.
Victor Duruy
Yo no entiendo por qué me importa tanto un hombre cuando existen tantas cosas mejores a mano.
Amy Winehouse
De pronto hay gente que por tener el poder de estar en una cámara y un micrófono, y poder hablar y destruir la vida de quien sea deciden que tú eres una sangrona, una no se que y una no se que, y ni siquiera han cruzado contigo tres palabras.
Anahí Puente
No sé sobre mi futuro. No sé nada sobre el mañana. Solo puedo controlar lo de hoy o el presente, ahora. No me gusta mucho pensar en el futuro, porque el presente es más importante para mi.
Ayumi Hamasaki
Como la lluvia penetra en una casa con mal tejado, así el deseo penetra en el corazón mal entrenado.
Buda Gautama
¡El miedo no te protege de nada, te expone a todo! Pero eso no impide ser prudente. La prudencia es la inteligencia del valor.
Daniel Pennac
Puede decirse que es un defecto ser demasiado profundo. La verdad no siempre está dentro de un pozo.
Edgar Allan Poe
Tiene en su poder la luz y la sombra, pero su luz no ofende nunca, y su oscuridad aún deja ver los contornos claros.
Ferruccio Busoni
La verdadera elocuencia consiste en no decir más de lo que es preciso.
François de La Rochefoucauld
Por primera vez desde la II Guerra Mundial la comunidad internacional está unida. El liderato de las Naciones Unidas, que en un tiempo era solo un ideal anhelado, está confirmando ahora la visión de sus fundadores. Por lo tanto, el mundo puede aprovechar esta oportunidad para realizar la promesa hecha mucho tiempo atrás de que habrá un nuevo orden mundial.
George H. W. Bush
Desdichado el que duerme en el mañana.
Hesíodo
La franqueza áspera produce las más de las veces odio; pero la lisonja produce desprecio siempre.
Ignacio Manuel Altamirano
La muerte es la única cosa más grande que la palabra que sirve para designarla.
Jean Rostand
¿Qué si soy un romántico? He visto Cumbres Borrascosas diez veces. Sí soy un romántico.
Johnny Depp
Se lo pasan por el forro de sus caprichos.
José María García
¡Ya no soy aquélla Rosina que tanto perseguisteis! Soy la pobre condesa Almaviva, la triste mujer abandonada a la que ya no amáis.
Pierre-Augustin de Beaumarchais