Vivir es una tarea urgente.
Vanessa Montfort
En tiempos de crisis la imaginación es más efectiva que el intelecto.
Albert Einstein
Uno de los principales objetivos de la educación debe ser ampliar las ventanas por las cuales vemos al mundo.
Arnold H. Glasow
Ahora a Gardel en vez de escucharlo, lo analizan. Es un disparate pedirle conciencia de clase, como es un disparate pedirle conciencia de clase a Cassius Clay o a Bonavena. El es un mito. Como Rockefeller, con la diferencia que éste no fue un cantor de éxito, que empezó de abajo, prosperó y se adaptó a su público. A un hombre que canta bien no se le pregunta si traiciona o no a su clase.
Arturo Jauretche
Muchas veces nace la enfermedad del mismo remedio.
Baltasar Gracián
Uno podría pasarse la vida reflexionando sonbre si mismo, y no darse cuenta de que no lo merece.
Elias Canetti
Al diseñar una vivienda se ha de prestar atención a los espacios necesarios para la vida diaria, como despensas, almacenes, cámaras frigoríficas. Lo más práctico es situar la despensa junto a la cocina.
Ernst Neufert
El poder desgasta sólo a aquel que no lo tiene.
Giulio Andreotti
Deseé crear nuevos aspectos, para extraer nuevas formas del hombre.
Jean Arp
Mi alimento es hacer la voluntad del que me ha enviado y llevar a cabo su obra.
Jerónimo Usera
No necesito demasiado. El glamour y todas esas cosas no me excitan. Estoy contento por tener al baloncesto en mi vida.
LeBron James
El mercantilismo, el cual alcanzó su máximo en la Europa de los siglos diecisiete y dieciocho, era un sistema del estatismo que empleaba la falacia económica para construir una estructura de poder imperial, así como subsidios especiales y privilegios monopólicos para individuos o grupos favorecidos por el estado.
Murray Rothbard
Donde hay religión se presumen todos lo bienes; donde falta, hay que presumir lo contrario.
Nicolás Maquiavelo
Cada generación hace su propia contabilidad para sus niños.
Robert Kennedy
No tengo otra alternativa. Sólo acribillándome a balazos podrán impedir la voluntad que es hacer cumplir el programa del pueblo.
Salvador Allende
A veces me parece oír su voz. Oírle vivo. Ni siquiera las fotografías me producen tanto efecto como la voz. Pero no me llama nunca. Y en sueños, soy yo quien lo llamo.
Svetlana Alexijevich