Yo escribo un manifiesto y no quiero nada, digo sin embargo ciertas cosas y estoy por principio contra los manifiestos, como también estoy contra los principios.
Tristan Tzara
Cuando el autor escribe la palabra fin, la historia ya no es suya. Pasa al lector, que puede ayudar al propio autor a comprender mejor lo que ha escrito.
Aldo Giuffré
Aquellos que no estudian su historia estan condenados a repetirla.
Anónimo
Un saco vacío se mantiene muy difícilmente en pie.
Benjamin Franklin
Dios no está con nosotros porque odia a los idiotas.
Clint Eastwood
Cuando un hombre quiere matar a un tigre, lo llama deporte; cuando es el tigre quien quiere matarle a él, lo llama ferocidad.
George Bernard Shaw
¿Cuántos recuerdos o emociones ha encontrado?
Grigori Rasputín
El libro que no se lee no ayuda.
Jim Rohn
Un buen caminante no deja huellas.
Lao-Tse
Se podría expresar así. En una sociedad cada vez más materialista, algunos chinos se están pasando al budismo, al taoísmo o al cristianismo para obtener respuestas espirituales. - ¿Y el comunismo? -Los miembros del Partido creen en él, pero en este período de transición las cosas pueden ser difíciles. La gente no sabe qué les ocurrirá al día siguiente. Así que puede que no sea tan malo tener algo en lo que creer.
Qiu Xiaolong
Si el lenguaje y el estilo de Balzac permanecieron durante toda su vida irremediablemente impuros, se debió sólo a que en la época decisiva, en la época del desarrollo, fue desaliñado consigo mismo.
Stefan Zweig
La pasión nace del corazón y se manifiesta en forma de optimismo, entusiasmo, conexión emocional, determinación. Alimenta un impulso implacable.
Stephen Covey
Con una mentira es posible que engañes a alguien; pero cualquier mentira te dice a ti mismo una gran verdad indiscutible: eres débil.
Thomas Wolfe
- ¿Qué tal?. - Oh... muy interesante. Nunca antes me había besado un sociópata.
Tim Roth
El sufrir merece respeto, el someterse es despreciable.
Victor Hugo
Cuando no somos capaces ya de cambiar una situación, nos enfrentamos al reto de cambiar nosotros mismos.
Viktor Frankl