Sin palabras, vengadores, negamos solitarios la facultad de despertarnos mutuamente voluptuosidad.
Tove Ditlevsen
El mismo lobo tiene momentos de debilidad, en que se pone del lado del cordero y piensa: Ojalá que huya.
Adolfo Bioy Casares
Los hombres y las mujeres pertenecen a diferentes especies y la comunicación entre ellos se encuentra todavía en su infancia.
Bill Cosby
Yo no imparto enseñanza al que no se esfuerza sinceramente en aprender.
Confucio
Nosotros los revestimos con títulos espléndidos, aunque sean criminalísimos: a éste lo llamamos católico, a aquél serenisimo, a uno ilustrisimo, a otro augusto a todos los denominamos dilectos hijos.
Erasmo de Róterdam
No tengo suficiente talento para correr y sonreír a la vez, reconoce Emil. Correré con un estilo perfecto cuando se valore la belleza de una carrera según un baremo, como en el patinaje artístico. Pero yo, de momento, lo que tengo que hacer es correr lo más rápido posible.
Jean Echenoz
La intuición tan solo es la suma de todas tus experiencias.
Jo Nesbø
Cada compositor es único y aporta algo irremplazable al género humano, si es original.
Karlheinz Stockhausen
El público es un hombre que sabe de todo, y de nada entiende.
Ludwig Robert-Tornow
El libre pensamiento de una edad es el sentido común de la siguiente.
Matthew Arnold
Podría entender que llorasen los de Extremadura o Cantabria, pero no esos.
Miguel Ángel Revilla
El fútbol es un juego de errores. El equipo que hace menos errores en un juego por lo general gana.
Paul Eugene Brown
El espíritu humano saldría, tal vez, ganancioso, si todos los escritores de segunda fila desapareciesen.
Ralph Waldo Emerson
Amar a una sola es muy poco; amar a todas es ser superficial; pero conocernos a nosotros mismos y amar a cuantas no sea posible, saber ocultar en nuestra propia alma las potencias del amor, de modo que ésta se alimente de ellas, que nuestra conciencia abrace el todo, ¡eso sí es el placer, eso sí es la vida!
Søren Kierkegaard
No des la felicidad de muchos años por el riesgo de una hora.
Tito Livio
No quiero arte para unos pocos más que la educación para unos pocos, o la libertad para unos pocos.
William Morris