Solo tenemos una vida, por qué malgastarla durmiendo.
Toby Stephens
No llego a comprender por qué, siendo los niños tan inteligentes, los adultos son tan tontos. Debe ser fruto de la educación.
Alejandro Dumas
El hormigón es la piedra que fabricamos...
Auguste Perret
Debemos redescubrir dónde yace la capacidad de innovar: en la adquisición de nuevas competencias como las técnicas de dirección digital, la capacidad de concentración a pesar de la multiplicidad de soportes, el trabajo en equipo y la vocación de solventar problemas.
Eduardo Punset
¡Ay! Supe más tarde que, preocupada por su propia carrera, jamás oyó mi nombre, ni supo de mis luchas, mi concierto o mi éxito.
Hector Berlioz
El necio se sienta a la orilla del río a esperar que acabe de pasar el agua. Pero esta fluye, y continuará pasando eternamente.
Horacio
Manifestar nuestras ideas, nuestros pensamientos y lo que deseamos. Ese es el primer paso hacia la amplitud de las libertades.
Ismael Leandry Vega
El administrador ayuda a los demás a verse como son. El líder los ayuda a verse mejores de lo que son.
Jim Rohn
Toda revolución es el final de un proceso, y hasta que se cumpla ese proceso, solamente se anotan parciales.
John William Cooke
Hay que escuchar a la cabeza, pero dejar hablar al corazón.
Marguerite Yourcenar
Tuve una vez en mis manos a uno de esos pájaros. Había muerto y caído a la tierra. Sus alas extendidas tenían el ancho de mis hombros, y el tamaño de su cuerpo no era mayor que el de mi dedo meñique. Pero esos pájaros no tienen patas. Duermen en el viento, y sólo caen a la tierra cuando mueren.
Tennessee Williams
La tolerancia es un crimen cuando lo que se tolera es la maldad.
Thomas Mann
¿Quién no tomará pluma, ante la luna de hoy?
Ueshima Onitsura
En vano tallamos lo mejor posible ese tronco misterioso que es nuestra vida; la veta negra del destino aparecerá siempre.
Victor Hugo
El hombre que da mordiscos al pan o come los guisantes con cuchillo, para mí es un hombre sin remedio.
W. S. Gilbert
Amar significa abrirle la puerta a ese destino, a la más sublime de las condiciones humanas en la que el miedo se funde con el gozo en una aleación indisoluble, cuyos elementos ya no pueden separarse. Abrirse a ese destino significa, en última instancia, dar libertad al ser: esa libertad que está encarnada en el Otro, el compañero en el amor.
Zygmunt Bauman