No hay criatura sin amor, ni amor sin celos perfecto, ni celos libres de engaños, ni engaños sin fundamento.
Tirso de Molina
El camino de todos los pueblos hacia el socialismo lleva intrínsecas las características nacionales de cada país.
Agustín Tosco
Siempre procuro conservar la fe en mis dudas, hermana. La lana de las ovejas negras también abriga.
Anna Lee
La vida es como un cesped en que estas postrado... levantate y aprovecha antes que el cesped te cubra...
Anónimo
El amigo seguro se conoce en la situación insegura.
Ennio
El médico, en la guerra, es el único que no quiere matar, el único para quien no existe el enemigo, porque no hay enemigo capaz de esconderse dentro de un hermano.
Gregorio Marañón
Mientras que las nubes en el cielo ya se van tiñendo de carmín, duerme niña, duerme sin recelo, que velando estoy cerca de ti.
Guillermo González Camarena
Las maneras corteses son, en buena parte, una especie de hábito reglamentario que uno abandona al entrar en su casa.
Gustave Vapereau
Siempre he tratado de mezclar mis papeles tanto como pueda.
Jeff Bridges
Curiosidad: Impulso humano que oscila entre lo grosero y lo sublime. Lleva a escuchar detrás de las puertas o a descubrir América.
José María Eça de Queirós
El único seguro que tienen los hombres para mantener su libertad política consiste en mantener su dinero en sus propios bolsillos.
Lysander Spooner
Los sentimientos se facilitan, no se imponen. Si alguien ha dejado de sentir amor o afecto, ni debe obligarse a sentirlo, ni podemos exigirle que tenga manifestaciones que no le surgen espontáneamente.
María Jesús Álava Reyes
La inactividad sólo apetece cuando tenemos demasiado que hacer.
Noël Coward
Estamos protegidos por filtros que atenúan todas las señales que nos llegan del exterior.
Ramón J. Sender
Las ideas se corroboran con sugerencias.
Salomón
No me arrepiento de las miles de veces que vine a casa con las manos vacías, después de haber perdido todas mis provisiones y cebo. Cuando los días se hacen tan sombríos como ese, entonces sabes que pronto encontrarás el tesoro.
Soichiro Honda