No engañes, pero no te dejes engañar.
Thomas Alva Edison
Los que escriben con claridad tienen lectores; los que escriben oscuramente tienen comentaristas.
Albert Camus
En una novela policíaca se supone que todo el mundo puede ser el asesino. Atravieso el país en tren: los maravillosos bosques alemanes, tan parecidos a los dibujos de mis libros de cuentos de hadas. Luego una idea se intuye: por esos bosques huían prisioneros perseguidos.
Alberto Manguel
El sentido moral es de gran importancia. Cuando desaparece de una nación, toda la estructura social va hacia el derrumbe.
Alexis Carrel
Es más fácil luchar por unos principios que vivir de acuerdo con ellos.
Alfred Adler
El ser humano es un animal de manada y necesitamos a la manada a nuestro alrededor, necesitamos tenerla cerca, necesitamos el calor y el tacto de otros seres humanos.
Camilla Läckberg
Hay que mejorar la condición femenina. Las cocinas son demasiado pequeñas, los fregaderos demasiado bajos y el mango de las cacerolas está mal aislado.
George Wolinski
En los breves informes mensuales de la Policía de Seguridad, sólo quiero cifras sobre si muchos Judios han sido enviados fuera y cómo se encuentran actualmente a la izquierda.
Heinrich Himmler
No puede conseguirse ningún progreso verdadero con el ideal de facilitar las cosas.
Hermann Keyserling
Cristo nos resulta imprescindible por el simple hecho de estar embarcados en una existencia abocada a la muerte.
José Ramón Ayllón
Si quieres ser tratado con dignidad, demuestra ser responsable, justo y digno.
Kalimán
Las ideas creativas florecen mejor cuando se conserva un espíritu de diversión.
Leo Burnett
El monopolio nunca es un buen instrumento. Quien domina el mercado, domina precios y no actúa en beneficio del consumidor. De modo tal que soy una convencida de que mientras más oferta haya, me parece muy saludable.
Lourdes Flores
Moraleja de todas las fábulas: el hombre es un animal.
Marco Denevi
De gustos no hay nada escrito, y menos hoy cuando el arte contemporáneo, tras repudiar a la belleza, ha contraído segundas nupcias con la filosofía y busca su justificación en miríficos folletos explicativos, o más simplemente, en el argumento de autoridad (de un crítico o de un mercader).
Ricardo García Damborenea
Prometo amarte siempre, todos los días, por toda la eternidad.
Stephenie Meyer