En los bosques me espera la única persona con la que puedo ser yo misma: Gale.
Suzanne Collins
Tu corazón sabe lo que necesitas. La otras personas tienen otras agendas.
Brian Weiss
La culpabilidad, la vergüenza y el miedo son los móviles inmediatos del engaño.
Daniel Goleman
Tenemos por norma respetar la libertad, tanto en los asuntos públicos como en las rivalidades diarias de unos con otros, sin enojarnos con nuestro vecino cuando él actúa espontáneamente, ni exteriorizar nuestra molestia, pues ésta, aunque inocua, es un espectáculo poco agradable.
Esperanza Aguirre
Cuando el primer niño rió por primera vez, su risa se rompió en mil pedazos que saltaron por los aires en todas direcciones, y así fue como aparecieron las hadas. Por eso debería haber un hada para cada niño y cada niña. Aunque hoy en día los niños saben tantas cosas que dejan de creer muy pronto en las hadas.
Freddie Highmore
Más a las veces son mejor oídos el puro ingenio y lengua casi muda, testigos limpios de ánimo inocente, que la curiosidad del elocuente.
Garcilaso de la Vega
Ya a esta altura de mi carrera no creo que vaya a jugar mucho mejor sobre el pasto ni tampoco pretendo hacerlo, nunca me voy a adaptar a esta superficie Wimbledon 2006
Gastón Gaudio
El amor no lo es todo.
Gayle Forman
Reconócete esta adorable persona eres tú debajo de un gran sombrero Canotier ojos nariz boca este es el óvalo de tu rostro tu exquisito cuello por fin, también la imagen de tu busto adorado visto como a través de una nube. Lo que bate, un poco más abajo, es tu corazón.
Guillaume Apollinaire
Bandoneón, para qué nombrarla tanto, no ves que está de olvido el corazón y ella vuelve noche a noche como un canto en las gotas de tu llanto, ¡Che bandoneón!
Homero Manzi
El sabio puede cambiar de opinión. El necio, nunca.
Immanuel Kant
Cualquier verdad ignorada prepara su venganza.
José Ortega y Gasset
Viene cada año y vendrá para siempre. Y con la Navidad vienen los recuerdos y las costumbres. Esos recuerdos cotidianos humildes a los que todas las madres nos agarramos. Como la Virgen María, en los rincones secretos de su corazón.
Marjorie Holmes
El aikido, no es para un país o para alguien en particular, es mi herencia a la humanidad.
Morihei Ueshiba
Pierde el tiempo al antojo de tu amada.
Ovidio
Nadie pudo saltar los puentes que nos conducían al sueño y del sueño a nuestros sueños y de nuestros sueños a la eternidad.
Paul Eluard