Desde que era pequeña el mundo oriental me ha cautivado. Mi hermano vivió una larga temporada en Srinagar. Cuando venía nos hablaba de la India y yo me quedaba embobada con sus relatos sobre la mezcla de religiones y de culturas. Esto despertó en mí y en mis hermanas una gran admiración por este país, lo que ha hecho que lo visitemos en más de una ocasión.
En la guerra, la fortuna es variable. Por eso, el guerrero prudente no debe menospreciar al enemigo.