El acto poético consiste en considerar repentinamente que una idea parte en varios motivos de igual valor y agrupados, rimen.
Stéphane Mallarmé
No hay ninguna cosa seria que no pueda decirse con una sonrisa.
Alejandro Casona
Mis arreos son las armas, mi descanso el pelear, mi cama las duras peñas, mi dormir siempre velar.
Anónimo
Cada hombre apaleado vale por diez no apaleados.
Aún más, ellos dicen (los filósofos) que Dios no puede jamás ser demostrado a priori, ya que él no tiene ninguna causa, sino tan sólo con probabilidad o a través de sus efectos.
Baruch Spinoza
La condesa, dando alaridos, se abalanzó sobre él con la furia de una hiena y le mordió en el pecho. El conde dio un empujón a la rabiosa mujer y la tiró al suelo, donde entregó su espíritu en medio de las convulsiones más espantosas. El conde enloqueció.
E. T. A. Hoffmann
La Teoría de Sistemas reúne sincréticamente los elementos más diversos: en un sentido, caldo excelente de cultivo, en otro, confusión. Pero ese caldo de cultivo ha suscitado contribuciones a menudo muy fecundas en su diversidad misma.
Edgar Morin
El que se casa hace bien, y el que no se casa hace mejor.
James Howell
Del trampolín de mi espalda muchos saltaron, lo sé, nunca podré saber la altura que he prestao, en cambio, me han reprochado el no quedarme de a pie.
José Larralde
Yo soy jonsista, pero de José Antonio.
José Ruiz de la Hermosa
La muerte es una neurosis humana todavía insalvable. Sobre ella se vierten salmos de tinieblas, cuentos de terror, fábulas de infiernos, paraísos y reencarnaciones.
Manuel Vicent
Entre otras cosas, a mi me pagan, vivo de esto, cobro cifras obscenas, muchos más obscenas que la mayoría de las cifras, pero tampoco voy en contra de un proyecto. Vine aquí por lo que este club significa, no voy a operar en sentido contrario.
Marcelo Bielsa
La mejor manera de predecir el futuro es creándolo.
Peter F. Drucker
Dios no paga al final de cada semana, pero paga.
Reina Ana de Austria
Yo me considero un artista del fútbol.
Ronaldo
Pero matar a un hombre porque, basándome en sus acciones o en sus amenazas, se me ocurre pensar que él me matará a mi en cuanto pueda (y cuando yo tengo tiempo y medios de pedir protección del poder soberano), es un crimen.
Thomas Hobbes