Cuanto más se agrada, generalmente menos profundamente se agrada.
Stendhal
La alegría de ver y entender es el más perfecto don de la naturaleza.
Albert Einstein
Una nación que no pide más que el orden ya es esclava en el fondo de su corazón.
Alexis de Tocqueville
El día es de los hombres; mas la noche, de los dioses, decían los antiguos.
Amado Nervo
La Mente gobierna todas las cosas que tienen vida, tanto las más grandes como las más pequeñas.
Anaxágoras
¿Qué puede ser más hermoso que una adorable anciana, siendo cada vez más sabia con el correr del tiempo? Toda edad puede ser encantadora, siempre y cuando vivamos en ella.
Brigitte Bardot
La matemática ha avanzado por aquellos que se distinguieron más por su intuición que por rigurosas pruebas.
Felix Klein
El espíritu humano avanza de continuo, pero siempre en espiral.
Goethe
Un ingenioso robo fue digno de elogio entre los espartanos, y de igual manera es entre los cristianos, siempre que sea a una escala suficientemente grande.
Herbert Spencer
Todos nacemos felices. Por el camino se nos ensucia la vida, pero podemos limpiarla.
Isabel Allende
El hombre que está solo no está en ningún sitio.
Jesús Jiménez Domínguez
El cambio es ley de vida. Cualquiera que sólo mire al pasado o al presente, se perderá el futuro.
John F. Kennedy
El auténtico observador contempla tranquila y despreocupadamente los nuevos tiempos revolucionarios.
Novalis
Últimamente se han escrito varias obras de teatro sobre la monstruosa injusticia que supone el actual código de moral social. Por supuesto que es una vergüenza insultante que haya una ley para el hombre y otra para la mujer. Yo creo que no debería haber ley alguna para ninguno de los dos.
Oscar Wilde
Quienes no tienen nada que perder jamás piensan en la vida eterna.
Paulo Coelho
La ciencia ficción no es más que la búsqueda de respuesta a las preguntas perennes: ¿Por qué? ¿Dónde? ¿Cómo? A pesar de su nombre, es la menos precisa de todas las literaturas. Su destino es errar de una pregunta a otra y a veces, dar con la respuesta. Para acercarse a ella se requiere la certeza de que un poema oscuro dice mucho más que un discurso claro.
René Rebetez