La primera condición para la inmortalidad es la muerte.
Stanisław Jerzy Lec
El progreso verdadero si nos atenemos a las palabras del Dr. R. R. Marett, es el progreso en caridad, siendo menos importantes que éste, todos los demás adelantos.
Aldous Huxley
Al día de hoy lo único que funciona en Cataluña es un club de fútbol.
Arcadi Espada
Diez mil locos puestos en un montón no hacen una persona razonable.
Arthur Schopenhauer
La idea del Hotel del Millón de Dólares es mía, de hecho yo hice el diseño básico de los personajes. Escribí algunas líneas y cuando menos me di cuenta, la película había nacido.
Bono
Me gustan los sinsentidos, despiertan a las células del cerebro. La fantasía es un ingrediente necesario para vivir, es como mirar la vida por el lado equivocado del telescopio. Eso es lo que hago y lo que te permite reírte de la realidad.
Dr. Seuss
Por malo que sea un gobierno, hay algo peor, y es la supresión del gobierno.
Hippolyte Taine
... al manterner el brazo en alto me permitió ver su axila, y cuando una mujer desnuda permite ver eso, y descubre una o ambas, es como si ofreciera un suplemento de desnudez con ello.
Javier Marías
Cuando uno se sienta a una abundante mesa, siempre tiene razón.
Jean François Collin d'Harleville
No me atreví a pasar más adelante y relatar las cosas más modernas, por no lastimar a algunos si decía la verdad, ni faltar al deber si la disimulaba. Historia general de España.
Juan de Mariana
...¿quién se indigna a causa de las víctimas de la revolución socialista? Casi siempre son, precisamente, los que han preparado y glorificado las víctimas de la guerra imperialista,...?
León Trotski
No no sólo tengo taco gastado en el escenario, sino que también en calle, vereda y cordón.
Moria Casán
Vive tu vida y olvídate de tu edad.
Norman Vincent Peale
Dicen que escribir ayuda a comprender los problemas, conmigo funciona la inversa: cada día estoy más confundido.
Pedro Juan Gutiérrez
Los que saben mucho se admiran de pocas cosas, y los que no saben nada se admiran de todo.
Séneca
El interés es el perfume del capital.
Voltaire