Un hombre sensato no debe hablar con un necio.
Sófocles
Apenas tenemos tiempo de darnos cuenta de que no tenemos tiempo.
Adolfo Caballero Guirado
Éste llama a una ambulancia, éste otro a una funeraria. Voy a preguntárselo otra vez y dependiendo de la respuesta escogeré uno u otro.
Billy Bob Thornton
Es más fácil aprender mecánica que psicología masculina. Una moto puedes llegar a conocerla, a un hombre jamás.
Carmen Maura
Hablando con claridad, yo no soy otra cosa que una madeja de prejuicios, formada de simpatías y antipatías.
Charles Lamb
La ética es la práctica de reflexionar sobre lo que vamos a hacer y los motivos por los que vamos a hacerlo.
Fernando Savater
La prensa es la artillería de la libertad...
Hans Christian Andersen
La libertad es un hecho, y entre los hechos que observamos, no hay ninguno que sea más claro.
Henri Bergson
Por eso canto, canto, canto porque tienes tanto, tanto, tanto como un beso en flor. Tienes eso, eso, eso que me tiene preso, eso, eso, tienes todo eso, eso, eso que se llama amor...
Homero Expósito
Ya saben que a los catalanes no hay cosa que nos guste más que ganar en Madrid.
Joan Manuel Serrat
Pretender que los hombres sean perfectos dentro de los elementos de la conducción sería pretender lo imposible. ¡Lo que nosotros tenemos que tratar es que sea perfecta, a pesar de los defectos de los hombres!
Juan Domingo Perón
Teníamos dos opciones, estar calladas y morir o hablar y morir, y decidimos hablar.
Malala Yousafzai
El mayor peligro para la mayoría de nosotros no radica en establecer unos objetivos demasiado altos y fracasar pronto, sino en establecer unos objetivos demasiado bajos, y lograrlos.
Miguel Ángel Buonarroti
Uno inventa la verdad exactamente como inventa la mentira.
Odysséas Elýtis
Voy a decirles lo que creo que son las dos cualidades de una obra de arte... En primer lugar, debe ser indescriptible, y en segundo lugar, debe ser irrepetible.
Pierre-Auguste Renoir
La novela no podría haber existido sin su historia de amor. Y esa historia era la razón de que la novela fuera tan leída. Si él no hubiera conocido a Otoko, nunca habría sabido lo que era un amor como aquél. El encontrar un amor como aquél a los treinta años podía considerarse una fortuna o una desdicha él no habría sabido decir qué era, pero no cabía duda de que había posibilitado su exitoso debut como autor.
Yasunari Kawabata