Hoy voy a patrocinar el candor desahuciado, esa crítica masa de Dios que no es pos ni moderna. Se admiten proscritos, rabiosos, pueblos sin hogar, desaparecidos, deudores del Banco Mundial.
¡Tras los azotes se levantan, más poderosos que ellos, nuestra audacia y nuestra obstinada libertad!