El interés no proviene de lo que uno tiene para contar, sino del modo de contarlo.
Silvia Adela Kohan
Lo que siempre, en todas partes y por todos. (ha sido creído)
Anónimo
Lo que no está claro no es francés.
Antoine de Rivarol
El azar tiene muy mala leche y muchas ganas de broma.
Arturo Pérez-Reverte
Cuarenta y ocho mil horas pueden ser un segundo, y un segundo toda la eternidad.
Celeste Carballo
Las descargas ilegales son como el virus de la música y el cine. Lo único que no se puede piratear es el directo.
Chenoa
¿Es preciso que lo que constituye la felicidad del hombre sea también la fuente de su miseria?
Goethe
Mi opinión sobre la fortuna es que ella está escrita proféticamente en el carácter de cada cual. Esta es la regla interna según la cual las cosas externas tienen un distinto valor.
Ippolito Nievo
Inteligencia es lo que usas cuando no sabes qué hacer.
Jean Piaget
El deseo adquiere sentido cuando soy capaz de transformarlo en una acción.
Jorge Bucay
El uso del mantenimiento de la paz por la comunidad internacional, en búsqueda de intereses comunes, debe ser verosímil y legítimo. Una fuerza creíble sin legitimidad puede tener resultados inmediatos, pero no disfrutará del apoyo internacional a largo plazo.
Kofi Annan
Los ateos se ríen de ese ser superior al que se rinde culto bajo el nombre de ser supremo y reducen a polvo, una tras otra, todas las pruebas de su existencia, sin notar que ellos mismos obedecen así a su necesidad de un ser superior y que no destruyen al antiguo sino para dejar lugar a otro nuevo.
Max Stirner
Lo que los fascistas odian es la inteligencia.
Miguel de Unamuno
Se puede guiar a los hombres haciéndolos pensar por sí mismos, pareciendo dudar con ellos, conduciéndolos, como de la mano, sin que se den cuenta.
Voltaire
Nunca he conocido a un gran líder que no fuese apasionado. Cuando digo apasionado no me estoy refiriendo a que tenga que gritar y ser carismático. Muchos líderes son más bien tranquilos; sin embargo, cuando les oye hablar, usted puede sentir su pasión.
Warren Bennis
El desdichado no tiene otra medicina que la esperanza.
William Shakespeare