La transposición así cumplida del libido de objeto en libido narcisista conlleva manifiestamente, una resignación de las metas sexuales, una desexualización y, por lo tanto, una suerte de sublimación.
Sigmund Freud
La vida tiene sus obstáculos, pero aprendí pronto que siempre serán menores si se enfrentan con honestidad.
Alfred Molina
En presencia de la ruina espiritual de España hay que ponerse una piedra en el sitio donde está el corazón y hay que arrojar aunque sea un millón de españoles a los lobos, si no queremos arrojarnos todos a los puercos.
Ángel Ganivet
La eternidad profunda sonreía en tus ojos... Oh antorchas del mundo, en el cielo encendeos.
Gérard de Nerval
Este país necesita poetas.
Glauber Rocha
El hombre está más fuertemente organizado para el dolor que para el placer.
Jean Anthelme Brillat-Savarin
La guerra es el arte de destruir a los hombres, la política es el arte de engañarlos.
Jean le Rond d'Alembert
Sólo la lluvia deja una pasión equívoca en el banco vacío de los enamorados.
Luís García Montero
La experiencia es lo único que trae consigo el conocimiento, y cuanto más tiempo estés en la tierra tanta más experiencia has de adquirir.
Lyman Frank Baum
Fue muy, muy difícil dejar la universidad por la música, porque mis padres obviamente no querían que la dejara. Mi padre se puso furioso conmigo, totalmente furioso. Estoy seguro de que no se habría vuelto tan loco si me hubiera enrolado como voluntario en el ejército. Cualquier cosa menos esto.
Mick Jagger
Es inútil. Dicen que a veces uno se ahoga en el desengaño; pues bien, ¡Resígnate tras haber saltado al abismo de mi afecto!
Murasaki Shikibu
Aquellos que toman decisiones en la economía y en el mercado deben jugarse la piel en ello y ser responsables de la falta de sus equivocaciones, no meros espectadores.
Nassim Taleb
Cualquier preocupación sobre qué está bien y qué está mal demuestra un estancamiento en el desarrollo intelectual.
Oscar Wilde
Mi patria es mi hijo y mi biblioteca.
Roberto Bolaño
La cordura es una mentira acogedora.
Susan Sontag
En los bosques me espera la única persona con la que puedo ser yo misma: Gale.
Suzanne Collins