En la maldad, nunca se mostró infecundo el espíritu de una mujer.
Shackerley Marmion
Fue en España donde mi generación aprendió que uno puede tener razón y ser derrotado, que la fuerza puede destruir el alma, y que a veces el coraje no obtiene recompensa.
Albert Camus
La justicia es conciencia, no una conciencia personal, sino la conciencia de toda la humanidad. Los que reconocen claramente la voz de su propia conciencia por lo general también reconocer la voz de la justicia.
Aleksandr Solzhenitsyn
Para conocer a fondo una época es necesario un estudio de las palabras que santifica y de las palabras que demoniza.
Beatriz Villacañas
Aquí he venido a dar por accidente para afrontar la existencia y azar que lleva el náufrago de sus anhelos y la tempestad.
Fernando Delgadillo
Es tan absurdo que la gente se tome las cosas tan en serio... Seré honesto, a mis dieciocho años trabajé en mi actitud para no tener seriedades, ¿y qué? Estar vivo ya es demasiado extraño...
Frank Zappa
No puedo... Seguir masturbandome.
Gustavo Cerati
Erudición no enseña sensatez, pues se la habría enseñado a Hesíodo y a Pitágoras y aún a Jenófanes y a Hecateo.
Heráclito
Los que son sabios, poco hablan; y los que hablan mucho, son poco sabios.
Lin Yutang
¿Para qué hacer sufrir a un hombre casándote con él cuando se puede hacer felices a muchos?
Mae West
La mejor manera de amar a alguien es aceptarlo tal como es, eso es lo que yo hago con Antoine, no es fácil, pero sólo amar a los pendejos es fácil.
María Félix
Los sucesos turbulentos se describen mediante ecuaciones no lineales. Son difíciles de resolver... De hecho, habitualmente es imposible resolverlos. Así que la física nunca entendió toda esta clase de sucesos. Hasta hace unos diez años. La teoría que los describe se denomina teoría del caos.
Michael Crichton
Necesitamos la esperanza para que nuestra alegría sea perfecta.
Pierre Teilhard de Chardin
Más vale pájaro en mano que ciento volando.
Proverbio
Es la desgracia del hombre no contentarse nunca.
Simón Bolívar
Vale más morir de inanición que implorar una recompensa que se tiene ya merecida.
William Shakespeare