La mentira es bien mezquina; si la miras a trasluz se transparenta.
Séneca
Tu nombre era innombrable, porque había naufragado en la playa de unos labios desierto.
Aída Cartagena Portalatín
El dolor es más llamativo que la felicidad.
Ana María Matute
El miedo que tengo de que algún día caigas en esta corrupción me mueve a darte ahora un excelente preservativo contra las tentaciones de las dádivas.
Benito Jerónimo Feijoó
El mundo es un caos, la justicia es sólo un mito y yo no quiero ser juez de nadie. En mi corazón no guardo rencor,
Blanca Miosi
Me gustaría disponer de más tiempo..., pero ése es el único bien que ni siquiera mi vasta fortuna puede conseguir.
Dan Brown
El poco calor que recibió en su infancia se lo dió su abuelo, un emigrante alemán de 60 años que al llegar a los Estados Unidos se adaptó rápidamente a la cultura americana cambiando su profesión de violoncelista por la de forofo del béisbol.
Jackson Beck
La conciencia de un jurado nunca queda tranquila.
José Hierro
Cuanto yo viví en la niñez, en los dolores que se me contagiaron en la infancia, siguen influyendo de manera muy poderosa en cuanto pienso y en todo lo que siento como miembro de la sociedad.
José María Arguedas
La ambición no hermana bien con la bondad, sino con el orgullo, la astucia y la crueldad.
León Tolstói
Si quieres subir una escalera larga, no mires hacia ella, mira cada peldaño.
Leonardo Boff
Y yo como siempre opto por encogerme y tender así a desaparecer al norte de mi.
Nacho Vegas
En el fondo, la ideología tiene un poder de persuasión indiscutible. El discurso ideológico amenaza anestesiar nuestra mente, confundir la curiosidad, distorsionar la percepción de los hechos, de las cosas, de los acontecimientos.
Paulo Freire
Nada vale la pena de ser encontrado sino lo que jamás ha existido aún.
Pierre Teilhard de Chardin
Una contricción sincera es más eficaz que mil flagelaciones.
Talmud
La mente humana es limitada, pero la estupidez humana es ilimitada.
Wilhelm Steinitz