Y si me preguntas cuál es el límite de las riquezas, te diré que primeramente tener lo necesario y después tener lo suficiente.
Séneca
Vota temprano y vota a menudo.
Al Capone
Si lo que estás haciendo no es moverte hacia tus metas, entonces te estás alejando de ellas.
Brian Tracy
Espantoso juego del amor, en el cual es preciso que uno de ambos jugadores pierda el gobierno de sí mismo.
Charles Baudelaire
La ley enseña los dientes, pero no se atreve a morder.
Edward Young
Los débiles tienen un arma: los errores de los que se creen fuertes.
Georges Bidault
¡Adiós, esperanza! Y con la esperanza, ¡adiós, miedo! ¡adiós, remordimiento! Todos los bienes los doy por perdidos.
John Milton
Yo puedo estar equivocado y tú puedes tener la razón y, con un esfuerzo, podemos acercarnos los dos a la verdad.
Karl Popper
Todas las cosas están regidas por las leyes de la naturaleza.
Marcus Manilius
Recogía a Miguel todos los días a las 6:15 a.m. en Santa Librada, ya que el vivía en La Loma de la Cruz, gracias a un cuarto que le pagaba la Escuela Carlos Sarmiento; llegábamos tipo 7:00 a.m. al colegio, a las 12:40 p.m. salíamos y lo dejaba en su casa a la 1:30 p.m. Luego nos veíamos de nuevo a las 3:00 p.m. en las canchas panamericanas. Fui su chofer durante 10 meses. Reynaldo Rueda.
Miguel Calero
Viendo claramente la confusión, uno se libera de la confusión.
Nisargadatta
Siempre las madres tienen ese encanto secreto de tratarlo a uno como un niño.
Reinaldo Arenas
Tengo la oportunidad de que me escuchen, yo voy a aprovechar, entiendes? voy a aprovechar y voy a decir las cosas. Seria mucho mas fácil haber seguido con una onda chistosita, y mas fresa, y todo el mundo esta contento, y vamonos contentos, pero no.
Residente
Prefiero ser una gotita de amor, en un mar de amargura.
Teresa de Calcuta
Aquel día dejé de temer a perder y empecé a temer a no ganar, descubrí que no era yo el mejor y que quizás nunca lo fui.
Walt Disney
Piense usted en el tiempo que sustraemos al desarrollo de una idea, a la continuidad de un monólogo, a la visita de un recuerdo precioso, que, una vez interrumpidos, se escapan y se esconden en el desván de nuestra memoria para reaparecer quién sabe cuándo.
Xavier Villaurrutia