Imaginé una vida diferente para mí.
Saoirse Una Ronan
La lógica de la Bolsa no tiene nada que ver con la lógica cotidiana.
André Kostolany
No es la dificultad la que impide atreverse, pues de no atreverse viene toda la dificultad.
Arthur Schopenhauer
Sólo se puede ser totalmente uno mismo mientras se está solo: quien, por tanto, no ama la soledad, tampoco ama la libertad; pues únicamente si se está solo se es libre.
La conciencia es un despertador que todos ponen a la hora del proprio país.
Aurelien Scholl
Es un gran obstáculo para la felicidad esperar demasiado.
Bernard Le Bovier de Fontenelle
Pese a todo y contra todo, seguimos remando.
Carlos Menem
El escritor escribe su libro para explicarse a sí mismo lo que no se puede explicar.
Gabriel García Márquez
Cuando usted tiene un afecto triste, es que un cuerpo actúa sobre el suyo, un alma actúa sobre la suya en condiciones tales y bajo una relación que no conviene con la suya. Desde entonces nada en la tristeza puede inducirlo a formar la noción común, es decir, la idea de algo común entre dos cuerpos y dos almas.
Gilles Deleuze
Los hombres se vuelven más civilizados no en proporción a su deseo por creer, sino en proporción a su buena disposición a dudar.
H. L. Mencken
Ante cualquier desdicha que nos aflige, siempre nos admiramos al sentir menos de lo que a nuestro parecer debiéramos haber sentido.
Jacinto Benavente
Y junto al espejo había un par de zapatitos sobre la mesa, unas miniaturas que hasta a una gamuza diminuta le habrían quedado chicos, además de unos guantes pequeñitos, un pañuelito de bolsillo, qué sé yo qué más, todo en completo desorden, y sin embargo todo en conjunto era una preciosidad. ¿Cuál era su secreto? Sí, de las mujeres, ¿cuál era su secreto?
Milán Füst
Lo más importante cuando uno recita los Salmos, es decirlos para sí mismo.
Najman de Breslev
Los hijos comienzan la vida amando a sus padres; al hacerse mayores, los juzgan, y en ocasiones los perdonan.
Oscar Wilde
Hace muchas pesadillas que no eres mi sueño.
Pablo Hasél
Soy una tremenda pecadora, porque fui una buscadora de amor. No me daba cuenta de que el amor no se busca, se encuentra.
Tita Merello