Frase de Santiago Ramón y Cajal

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Los celos iracundos de algunas hembras significan, antes que el temor de perder un amante, el recelo de que se cierre un bols... - Santiago Ramón y Cajal

Los celos iracundos de algunas hembras significan, antes que el temor de perder un amante, el recelo de que se cierre un bolsillo.

Santiago Ramón y Cajal

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La diferencia entre un veneno, una medicina y un narcótico es sólo la dosis.

Albert Hofmann

¿Buscas algo? Googlealo. ¿Buscas a alguien? Facebookealo. ¿Quieres pensar? Twittealo.

Anónimo

El estudio de la poesía -es decir, del arte verdadero- tiene que empezar por una intuición y terminar con una intuición.

Dámaso Alonso

Un asesinato es un caso vulgar, un hecho más o menos vivo de bestialidad, de ferocidad.

Enrique López Albújar

Delfines, jugáis en el mar, Pero las olas son amargas. ¿A veces brota mi alegría? La vida es siempre despiadada.

Guillaume Apollinaire

Haz como querrías que hicieran contigo y ama a tu prójimo como a ti mismo.

John Stuart Mill

Aquello que nos promete el paraíso en la tierra nunca produjo nada, sino un infierno.

Karl Popper

Cada uno de nosotros posee más virtudes de lo que cree, pero sólo el éxito las pone de relieve, quizá porque entonces se espera que dejemos de manifestarlas.

Marguerite Yourcenar

El amor no es envidioso, ni jactancioso, ni orgulloso. No se comporta con rudeza, no es egoísta, no se enoja fácilmente, no guarda rencor.

Nicholas Sparks

Así es el mundo: un paso después de otro, una palabra y luego la siguiente.

Paul Auster

La calidad de un líder se refleja en los niveles de exigencia que fija para si mismo.

Ray Kroc

Cuando el hombre comienza a luchar consigo mismo, es señal de que vale algo.

Robert Browning

Siempre me ha sorprendido la escasa finura de mis contemporáneos, a mí, cuya alma se retorcía de la mañana a la noche tan sólo para encontrarse.

Samuel Beckett

La América es ingobernable... el que sirve a una revolución ara en el mar.

Simón Bolívar

Entre dos amantes, la prueba de que uno ama demasiado dispensa para siempre, a quien la recibe, de amar lo suficiente.

Will Rogers