Mientras el ser humano se sienta atraído exclusivamente por cosas tan efímeras como la belleza, el mundo estará lleno de insatisfechos.
Santiago Alonso
Un escritor no debe hablar sino escribir; el lector lee lo que ha escrito y punto; lo que ni has puesto en el libro no vale la pena decirlo de palabra.
Alberto Vázquez-Figueroa
Ateniéndonos a la costumbre pasaremos generalmente por hombres honrados, porque se toma por hombres honrados a los que lo hacen todo igual que los demás.
Anatole France
El lenguaje C es peculiar en muchos sentidos, pero él, como muchas cosas con éxito, tiene una cierta unidad de enfoque que se deriva de su desarrollo en un pequeño grupo.
Dennis Ritchie
Las grandes empresas se basan en grandes productos.
Elon Musk
Nada es malo de forma absoluta, sino con respecto a alguna otra cosa.
Giordano Bruno
La Ambición, la Presunción, la Temeridad, la Opresión, la Tiranía y otras compañeras y servidoras de estas diosas no es preciso que se las lleve consigo allí donde sería necesario que estuvieran todas ociosas por no haber campo suficiente para ellas.
Comencé a girar como un reloj, hoy el oro está en mi piel.
Gustavo Cerati
Siempre sentí que un científico debe al mundo sólo una cosa, que es la verdad como él la ve.
Hans Jürgen Eysenck
Me cuesta bajar el poema del aire, allí donde me hundo con el plumaje vertical de las palabras. Rozando el infierno y el invierno el poema es un dios de pies ligeros apaleado por las estrellas.
José Barroeta
Pensó que la historia podría repetirse, y durmió arrullado por la sensación de que le envolvían los efluvios de una plácida y extraña dicha.
Miguel Delibes
Senna es y un taxista de San Pablo.
Nelson Piquet
La libertad es un lujo que no todos pueden permitirse.
Otto von Bismarck
¿Volvería a encontrar otra pálida princesa, de tristesojos encantados, que me admirase siempre magnífico? Ante esta duda lloré. ¡Lloré como un Dios antiguo al extinguirse su culto!
Ramón María del Valle-Inclán
Pon tu corazón, mente y alma, incluso en los actos más pequeños. Ese es el secreto del éxito.
Swami Sivananda
Lo peor era estar descalza, el suelo erizado de piedras, no podíamos pagarnos unas sandalias. ¡Cómo me sangraban los pies! No teníamos nada, ni casa, ni agua, éramos nómadas... pero teníamos el rebaño y a nosotros mismos.
Waris Dirie