Vivimos sin saber que nuestros traumas gobiernan nuestra vida.
Sandra Barneda
Las enemistades silenciosas y ocultas son más terribles que las abiertas y declaradas.
Cicerón
Sé bondadoso con la gente cuando subas; los encontrarás a todos cuando bajes.
Eduardo Punset
¡Qué apocado ha de ser el que no soporta el dolor del otro!
Elias Canetti
A medida que las personas se pierden en el frenesí de una vida dedicada a perseguir, como las ratitas con la palanca, los placeres sustitutos, pierden el contacto con sus necesidades más profundas, más auténticas.
Elsa Punset
Si queremos PAZ, Domínguez Brito Va, Si queremos honradez, Domínguez Brito es y si queremos llegar, Domínguez Brito ¡YA!
Francisco Domínguez Brito
La verdad no hace tanto bien en el mundo como el daño que hacen sus apariencias.
François de La Rochefoucauld
En cualquier ser siento al hombre, al dios, al gusano, al loco, al humano eternamente parecido a mí.
Goethe
Un cínico es un hombre que, en cuando huele flores, busca un ataúd alrededor.
H. L. Mencken
No hay hombres necesarios: no hay más que hombres útiles.
Hermanos Goncourt
El mapa de amor es esa parte de la mente donde almacenamos toda la información relevante sobre la vida de nuestra pareja.
John Gottman
Entre las nieblas pálidas la luna aparecía.
José Asunción Silva
Nadie nunca alcanzó, y ni siquiera podrá, alcanzar un grado de civilización digno de la simple satisfacción de las necesidades materiales...
Louis Brandeis
En el momento en que entiendo verdaderamente a mi enemigo, en el momento en que le entiendo lo suficientemente bien como para derrotarle, entonces, en ese preciso instante, también le quiero. Creo que es imposible entender realmente a alguien, saber lo que quiere, saber lo que cree, y no amarle como se ama a sí mismo. Y entonces, en ese preciso momento, cuando le quiero...
Orson Scott Card
Ser anarquista sólo significa que usted cree que la agresión no se justifica, y que los Estados emplean necesariamente la agresión. Y, por tanto, los Estados, y la agresión que necesariamente utilizan, no están justificados. Es muy sencillo, de verdad. Es una ética, por lo que no es de extrañar que confunda a los utilitarios.
Stephan Kinsella
Al miedo de un poder invisible, fingido por la mente o imaginado a partir de historias que han sido aceptadas por el público, lo llamamos religión; si no han sido aceptadas, superstición.
Thomas Hobbes