El lenguaje es el único instrumento del que dispone la ciencia, y las palabras son los signos de las ideas.
Samuel Johnson
En la juventud y en la belleza la sabiduría es escasa.
Homero
No creemos lo que pensamos porque vemos lo que vemos, sino que vemos lo que vemos porque pensamos lo que pensamos.
John Verdon
La revolución es una obra política. Es una realización concreta. Lejos de las muchedumbres que la hacen, nadie puede servirla eficaz y válidamente. La labor revolucionaria no puede ser aislada, individual, dispersa. Los intelectuales de verdadera filiación revolucionaria no tienen más remedio que aceptar un puesto en una acción colectiva.
José Carlos Mariátegui
El que no tiene opinión propia siempre contradice la que tienen los demás.
Lingrée
La raíz de todas las pasiones es el amor. De él nace la tristeza, el gozo, la alegría y la desesperación.
Lope de Vega
Ni temas ni desees la muerte.
Marcial
En el teatro me coarta mucho la limitación de tiempo y la limitación de espacio. Es decir, que lo que ocurre en el drama que tú quieres narrar no tenga más que una hora y media o dos horas de duración. Y otro tanto diríamos del espacio físico: toda tu historia debe estar ceñida a uno, dos o tres escenarios a lo sumo. Estas limitaciones me molestan.
Miguel Delibes
¡Estoy regalada!
Mirtha Legrand
Un tonto nunca se repone de un éxito.
Oscar Wilde
Veo lo que es bueno y lo apruebo; pero hago lo peor.
Ovidio
Creía que la Universidad sería diferente del resto del mundo, pero veo que pasa como en todas partes: la gente trata de satisfacer a unos capullos groseros y pedantes como Ambrose, mientras que a las buenas personas como Simmon no les hacen caso por simplonas.
Patrick Rothfuss
En el paraiso no existe el matrimonio: evidentemente para no turbar la serenidad del lugar.
Samuel Butler
El desarrollo de la tecnología pone en crisis el principio mismo de la empresa privada, pues sólo unas cuantas gigantes están en condiciones de disponer de las inmensas sumas de capital necesarias para utilizar dicha tecnología.
Santiago Carrillo
Aquí estoy, yo soy quien lo hice, vuelve tu espalda hacia mí.
Virgilio
Las empresas extraordinarias son imposibles para los que miden las dificultades según la apreciación general, imaginando que lo que otras veces sucedió, no pueda suceder de nuevo.
William Shakespeare