Educar es cultivar a un tiempo el conocimiento de lo verdadero, la voluntad de lo bueno y la sensibilidad de lo bello.
Salvador Jacinto Polo de Medina
En España la forma mejor de asegurarse una larga estancia en prisión en estos momentos es ingresar en ETA, con una particularidad: que desde el día en que un malhechor de ETA pone la bomba hasta el día que ingresa en la cárcel cada vez pasa, cada vez transcurre menos tiempo.
Alfredo Pérez Rubalcaba
Sobre las piedras de las leyes, no de la voluntad, se funda la verdadera política.
Diego de Saavedra Fajardo
Hay una oferta para cada demanda.
Florence Scovel Shinn
Tú eres la trompeta que pregona, tú eres la mano que lanza la semilla.
Frédéric Mistral
Lo bello es superior a lo sublime, porque es permanente y no sacia, mientras que lo sublime es relativo, pasajero y violento.
Henri-Frédéric Amiel
Alguno no llega jamás a ser hombre, y sigue siendo rana, ardilla u hormiga.
Hermann Hesse
Determinar la forma de gobierno más convincente para un país, es encontrar el medio de hacer concurrir en un punto todas las fuerzas sociales, es hallar el centro de gravedad de una gran masa para ponerla en equilibrio.
Jaime Balmes
El objetivo del tercermundismo es acusar y si fuera posible destruir las sociedades desarrolladas, no desarrollar las atrasadas.
Jean-François Revel
En literatura, el sueño es ya una opinión.
Joseph Isidore Samson
Podríamos decir que a mayor desamparo durante nuestra infancia, más fuerte será nuestro personaje.
Laura Gutman
Mañana, diez siglos contemplarán nuestra victoria.
Marlene Dietrich
Nunca se va tan lejos como cuando no se sabe a dónde se va.
Oliver Cromwell
¿No crees que ser curiosos es mucho más importante que ser parecidos? Porque somos diferentes podemos gozar la diversión de intercambiar mundos y regalarnos mutuamente nuestros amores y nuestros entusiasmos.
Richard Bach
Tenemos mayor necesidad de una visión, una meta y una brújula (un conjunto de principios o instrucciones), y menos necesidad de un mapa de ruta.
Stephen Covey
Los buenos guerreros hacen que los adversarios vengan a ellos, y de ningún modo se dejan atraer fuera de su fortaleza.
Sun Tzu