Cuando se descubrió que la información era un negocio, la verdad dejó de ser importante.
Ryszard Kapuściński
¡Que no me haga daño el amor de un hombre!
Anónimo
La ignorancia de la ley no es excusa para nadie.
Caminan en una calle de polvo y esperanza.
Carlos Drummond de Andrade
Los que no aman la vida no lo merecen.
Giacomo Casanova
Vivir toma mucho tiempo a las personas.
Jaroslaw Iwaszkiewicz
Para mí no hay más leyes que las del corazón.
José María Ruiz-Mateos
No sé por qué a todo el mundo le acojona tanto decir: te mueres, tío. Es lo que hace aún peor que nadie te lo diga.
Joseph Gordon-Levitt
Los enemigos de la Patria, por consiguiente nuestros, están todos muy acordes en estas ideas; destruir la nacionalidad aunque para ello sea preciso aniquilar a la Nación entera.
Juan Pablo Duarte
Todo está bien, ya soy un poco dios en esta soledad, con este orgullo que ha tendido a las horas una ballesta de palabra.
Leopoldo Marechal
El disfrute del arte y la literatura supone una cierta disposición y la sensibilidad por parte del público.
Ludwig von Mises
Para escribir poesía, debes estar dispuesto a perder el tiempo.
Robert Penn Warren
No vi la explosión. Sólo las llamas. Todo parecía iluminado. El cielo entero. Unas llamas altas. Y hollín. Un calor horroroso. Y él seguía sin regresar.
Svetlana Alexijevich
No son las riquezas ni el esplendor, sino la tranquilidad y el trabajo, los que proporcionan la felicidad.
Thomas Jefferson
La verdad no necesita el oropel de la retórica.
Thomas Middleton
La envidia daña al mismo envidioso.
Voltaire