Lo que distingue lo real de lo irreal está en el corazón.
Russell Crowe
Mejor es que los enemigos teman al príncipe por prudente que por arrojado.
Diego de Saavedra Fajardo
El niño conoce el corazón del hombre.
Edgar Allan Poe
La oralidad es la forma suprema de la comunicación.
Francisco Garzón Céspedes
Los nacionalismos surgen del resentimiento.
Gustavo Bueno
Los teólogos no producen las crisis; simplemente las señalan.
Hans Küng
Los que amamos la verdad no tememos el agua turbulenta ni sucia. ¡Lo que tememos es el agua poco profunda!
Irvin D. Yalom
Es el peso no los números de experimentos que ha de ser considerada.
Isaac Newton
Adonde faltan hombres de valor, todo lo dificultoso se da por imposible, y depura flojedad no se emprende cosa buena.
Joaquín Setantí
Patriotas de sus propios intereses y a los que nada importa la degradación moral.
Julia Navarro
Los edificios eran demasiado altos, los coches transitaban a velocidad excesiva y había demasiada gente. Tuvo que taparse los oídos cuando pasó un convoy de enormes camiones rusos. Todo le provocaba el asombro de lo nuevo: los edificios de apartamentos, las estudiantes de uniforme, las luces de las calles, los manteles, los ascensores y el sabor del vino.
Ken Follett
Dejemos a los envidiosos la tarea de proferir injurias y a los necios la de contestarlas.
Louis Emmanuel Dupaty
Aún un reloj parado tiene razón dos veces al día.
Marie von Ebner-Eschenbach
Los negocios son el dinero de los demás.
Paul Gavarni
Para luchar por la libertad no hacen falta odios; sin odio se abren los tuneles, sin odio se ponen diques a los ríos, sin odio se hiere la tierra para sembrar el grano, sin odio pueden aniquilarse a los despotismos, puede llegarse a la acción más violenta cuando sea necesaria para la emancipación humana.
Práxedis G. Guerrero
No hay nada tan común como el deseo de ser elogiado.
William Shakespeare