Es la tarde gris y triste. Viste el mar de terciopelo y el cielo profundo viste de duelo.
Rubén Darío
¡Cuántas mujeres se enamoran de un hombre, no para tenerlo, sino para no dejarlo a otra!
Albert Lindner
Soy plenamente responsable de mis propias limitaciones.
Anaïs Nin
El primer orden de la ayuda significa que uno sólo da lo que tiene, y sólo espera y toma lo que realmente necesita.
Bert Hellinger
La Biblia no dice qué dieta siguió Noé para llegar al Diluvio con seiscientos años de edad, ni cuál fue el método que usó la mujer de Abraham para quedar embarazada a los noventa, ni aclara si sabía hablar en hebreo la burra de Balaam, que discutía con su amo.
Eduardo Galeano
Estaba yo un día solo. Había pasado el águila real, y no solamente me había brindado uno de sus penetrantes vuelos de caza, sino que había estado describiendo las más fantásticas acrobacias en compañía de su pareja. ¡El águila! El macho y la hembra colgados en el cielo estuvieron como cinco o diez minutos, ¡quien sabe!... ¡Yo estaba prendado de sus alas!, ¡yo quería volverme pájaro!
Félix Rodríguez de la Fuente
Nihilista y cristiano: estas palabras riman, y no solo riman...
Friedrich Nietzsche
Una norma de vida: si puedes oler a ajo, todo anda bien.
J. G. Ballard
A la memoria de José Etxailarena.
Kutxi Romero
Ante las jugadas que el destino nos pone insospechadamente por delante, a veces no se puede aplicar la razón.
María Dueñas
La escuela no es deliberativa, no es el coloquio permanente. La escuela es la transmisión del saber, de las normas y de los valores, y en el primer lugar de todos, el del respeto. Quiero una escuela del respeto donde los alumnos se levanten cuando llega el profesor.
Nicolas Sarkozy
Siempre hay algo por hacer, que si no lo haces tú, no lo hará nadie. Nunca las cosas se arreglan solas. Ríete, y el mundo entero reirá contigo.
Noel Clarasó
En la vida matrimonial, tres es compañía y dos es ninguno.
Oscar Wilde
El cuando y el pero es la herencia de los tontos.
Proverbio Italiano
Ella es la fuerza viva, el soplo ardiente de cuanto sueña y goza, piensa y siente; de cuanto canta y ríe, vibra y ama.
Salvador Rueda
No es estable el dominio en lugar extraño.
Séneca