Algunas veces, pinto a la música. La pintura inspira mi música.
Ron Wood
La maternidad es la razón de ser de la mujer, su función, su goce, su salvaguardia.
Alphonse Daudet
Lo que ningún monarca ha podido conseguir ni por la espada ni por el fuego, lo han logrado hacer los eclesisiásticos con sólo la pluma.
Baruch Spinoza
Después de las derrotas y las cruces, los hombres se vuelven más sabios y más humildes.
Benjamin Franklin
El trabajo fortifica el cuerpo, mantiene la salud, prolonga la vida y hace que el tiempo parezca más corto, porque el trabajo está en el orden de la Naturaleza.
El terror está en el orden del día.
Bertrand Barère de Vieuzac
¿Qué presta a mi contento si soy del vano dedo señalado, si en busca de este viento ando desalentado con ansias vivas, con mortal cuidado?
Fray Luis de León
Conocido es el terror que sufren los obreros y antifascistas de Chile y la libertad de que, en cambio, disfrutan allí los agentes del nazismo hitleriano.
José Díaz Ramos
En general, el pueblo es más inteligente de lo que se piensa.
Joseph Goebbels
Porque el miedo, hábilmente administrado, es peor que la enfermedad. Ése es el problema, el miedo.
Juan Gérvas
Es inconcebible una revolución que no desemboque en la alegría.
Julio Cortázar
Quiero insistir con que mucho mejor es ser prestigioso que popular, que mucho más importante es el recorrido con el que uno llega a un lugar que el éxito o no que se obtenga en la búsqueda, que los hechos son mucho más significativos que las palabras, que demostrar es mucho más importante que hablar, que hay que permitir que ingrese la información que riega nuestra parte noble y evitar que ingrese la información que estimula nuestros bajos instintos.
Marcelo Bielsa
El gobierno peor es el que ejerce la tiranía en nombre de las leyes.
Montesquieu
Pienso que el gran error en las escuelas es tratar de enseñar a los niños usando el miedo como motivación.
Stanley Kubrick
Yo soy un cínico, de manera que por regla general suelo ver tan sólo lo negativo.
Stieg Larsson
Feliz el hombre que ha pisoteado todos sus temores y puede reír ante la proximidad de la muerte que todo lo vence.
Virgilio