Yo vengo de donde nace el tonito cordobés, de ahí vengo. De Córdoba capital.
Rodrigo Bueno
Tus amargos momentos tienen tiempo para convertirse en dulces recuerdos.
Alejandro Dumas
Si la gente quiere ver sólo las cosas que pueden entender, no tendrían que ir al teatro: tendrían que ir al baño.
Bertolt Brecht
Cuando me di cuenta de que era yo el que más aportaba a esa amistad, supe que tener amigos era una de las cosas más difíciles.
Blanca Miosi
Me gustaría dejar huella y que mi nombre quede grabado en los corazones.
Chayanne
La buena política conoce este secreto: cómo hacer morir de hambre a los que permiten vivir a los demás.
Eduardo Galeano
No hay lugar en mi alma, ningún rincón de mi carácter, donde Dios no está.
Evelyn Underhill
Existe, en verdad, un magnetismo, o más bien una electricidad del amor, que se comunica por el solo contacto de las yemas de los dedos.
Ferdinando Galiani
Te dicen descuidado por que están acostumbrados a los jardines, no a la selva.
Jaime Sabines
Si merezco algo de gratitud pública, no es por los palacios que hice, sino por haber abordado el problema de la arquitectura, el arte, la expresión de la sensibilidad humana. Sentí que la vivienda era el lugar de la familia, y que se podría probar algo grande por ese lado, en que hallé que había gran parte de la felicidad humana.
Le Corbusier
Por cada hombre que vive sin libertad, el resto de nosotros debe enfrentar la culpabilidad.
Lillian Hellman
Trabajé siempre para mi patria poniendo voluntad, no incertidumbre; método no desorden; disciplina, no caos; constancia no improvisación; firmeza, no blandura; magnanimidad, no condescendencia.
Manuel Belgrano
Te atan acontecimientos, pero el pensamiento es libre.
Nach
La moda es siempre un esperpento tal que nos vemos obligados a cambiarla cada seis meses.
Oscar Wilde
Yo trabajo para la satisfacción. El trabajo de un hombre es su vida entera. ¿Sabes? Si no te gusta el trabajo que haces, aléjate de él.
Ray Kroc
Cuando notan que una emoción empieza a aparecer, es muy importante que se sienten en una postura estable.
Thich Nhat Hanh