La Eulogia es, lejos, la mejor prienda que conocí en mi vida. Bien lejos... 20, 30 kilómetros. De cerca es así, jodida...
Roberto Fontanarrosa
Cuando un amante trata de crueldad la esquivez de su amada o el gusto de ella en hacerle sufrir, esto no es verdaderamente una hipérbole.
Arthur Schopenhauer
Cada cual tiene el diablo que se merece.
Arturo Pérez-Reverte
El equilibrio es la consideración más importante de la posición de en guardia.
Bruce Lee
Por la calle pasa un obrero. ¡Qué firme va! No tiene blusa. En el cuento, en el drama, en el discurso político, el dolor del obrero está en su blusa azul, de paño grueso, en las manos gruesas, en los pies enormes, en los desconsuelos enormes.
Carlos Drummond de Andrade
Antes de desear algo ardientemente conviene comprobar la felicidad que le alcanza a quien ya lo posee.
François de La Rochefoucauld
En el amor se soportan más cosas que en cualquier otra situación, se tolera todo.
Friedrich Nietzsche
No te mueras en mi casa...
Gustavo Cerati
La verdad en las distintas religiones no puede ser diferente, sino la única verdad; a través de todas las contradicciones, hemos de buscar lo complementario: a través de lo exclusivo, lo inclusivo.
Hans Küng
Que nadie se engañe: decir buenos días ya es hacer literatura.
Joan Fuster
Blasfemar contra el EspírituSanto es negar nuestra necesidad de arrepentimiento y no tener fe en Jesús, y esto nos priva del perdón de Dios.
Lucas Leys
Ser joven significa ser dueños de nuestra vida, de nuestro presente y estar dispuestos a desafiar nuestro porvenir; aceptar las circunstancias sin envidiar ni protestar; admitir la maravilla que somos y lánzanos a conquistar nuestro propio destino.
Miguel Ángel Cornejo
Pasa tus vacaciones en tu propia ciudad y gasta el dinero en trabajar en proyectos que ayuden a construir tu comunidad.
Patch Adams
La verdad es bella, sin duda, pero las mentiras también lo son.
Ralph Waldo Emerson
La madurez es aquella edad en que uno ya no se deja engañar por sí mismo.
Estrellas y árboles frutales en flor. La completa permanencia y la extrema fragilidad proporcionan por igual el sentimiento de la eternidad.
Simone Weil