Un día, cruzaré un negro con un chino, para sacar cría. El gobierno debería proteger ciertas especies.
Roberto Fontanarrosa
Haré un desdoblamiento de emociones para darte mi vida.
Aída Cartagena Portalatín
- Es cierto Doc, 12 de noviembre de 1955. - Increíble, podría significar esto, que el punto en el tiempo contiene intrínsecamente el significado cósmico de algún tipo. Casi como si fueran el punto de empalme para a quien corresponda su espacio-tiempo. Por otro lado, puede ser una coincidencia asombrosa.
Chris Lloyd
El precio medio de un CD son nueve coma noventaytantos euros. Esa es la magia de las estadísticas, que dicen que si usted cobra un millón de pesetas, y yo cero, cada uno cobramos medio millón, pero luego su deportivo seguro que será mejor que el mío.
David Bravo
Siempre hay peligro para aquellos que lo temen.
George Bernard Shaw
A beber, jovencito, hará que la parte de la seducción sea menos repugnante.
Kate Winslet
..., un partido desvinculado de las tareas históricas de su clase se convierte o corre el riesgo de convertirse en instrumento indirecto de las demás.
León Trotski
La verdadera adoración tiene que ver con tener devoción hacia Dios.
Lucas Leys
Un componente crucial de la propagación de cualquier cosa es precisamente el factor del gancho.
Malcolm Gladwell
Los proyectos que necesitan de mucho tiempo para ser ejecutados no tienen éxito casi nunca.
Montesquieu
Odiar es un despilfarro del corazón, y el corazón es nuestro mayor tesoro.
Noel Clarasó
¡El arte es el peor enemigo del arte!... un fetiche ante el que se ofician, arrodillados, quienes no son artistas.
Oliverio Girondo
Se equivoca profundamente quien crea que establece mejor la más duradera autoridad por la fuerza que por un pacto amistoso.
Terencio
La mayoría de las veces que pensamos estar enfermos, lo creamos en la mente.
Thomas Wolfe
Nunca a Dios llamaba bueno hasta después de comer.
Tirso de Molina
La sorprende como la sorprendería un objeto raro y extraordinario, una obra de arte; por la sencilla razón de que sigue siendo, a través del tiempo, pura y simplemente él mismo.
Virginia Woolf