La primera vez que vi el Rin, con cálidas lágrimas en mis ojos, yo, pobre artista, juré fidelidad a mi patria alemana.
Richard Wagner
No existe la libertad de prensa, tan sólo es una máscara de la libertad de empresa.
Arturo Jauretche
Creo que Mick Jagger estaría asombrado y sorprendido si él se dio cuenta de que para muchas personas no es un símbolo sexual, pero si una imagen maternal.
David Bowie
Ayer se fue; mañana no ha llegado.
Francisco de Quevedo
Conozco los secretos del alma del paisaje, y sé lo que entristece, y sé lo que consuela, y el viento traicionero y el bárbaro oleaje conocen la invencible firmeza de mi vela.
Francisco Villaespesa
Hasta que no sepas por qué la gente compra cosas, no venderás nada.
Hugh Finnerty
Uno recuerda el deporte; yo aprendí a perder desde niño, a reconocer a un bateador cuando no pude y me sacó la pelota de jonrón. A mí me gusta, incluso, darle la mano y un abrazo. Ah, pero también aprendí a ganar y a ser humilde en la victoria y aspirar a un adversario que reconozca con honor nuestra victoria.
Hugo Chávez
Mejor que de nuestro juicio, debemos fiarnos del cálculo algebraico.
Leonhard Euler
Cuando apareció la televisión se dijo que la radio se acabaría, que el nuevo medio nos iba a arrinconar, pero ha ocurrido al contrario, yo creo que la radio está hoy más fuerte que nunca.
Luis del Olmo
La cultura es una cosa y el barniz otra.
Ralph Waldo Emerson
La crítica no es más que una forma disimulada que tenemos para mostrar nuestra superioridad sobre los demás.
Renny Yagosesky
Pero el sol tiene su utilidad, eso a nadie con dos dedos de frente se le escapa, dijo Seaman. De cerca es el infierno, pero de lejos es útil y hermoso, sólo un vampiro sería incapaz de reconocerlo.
Roberto Bolaño
Yo moriría por vos. Vos, ¿vivirías por mi?
Silvina Ocampo
Muchos que se adelantaron a su tiempo tuvieron que esperarlo en sitios poco cómodos.
Stanisław Jerzy Lec
Yo no terminaré comprando un montón de cosas, porque me parecen ridículas.
Steve Jobs
Yo juzgo que toda esposa tiene perfecto derecho a insistir en visitar París.
Sydney Smith