Aún te amo, no sé si por idiota o por romántico, no sé si por novato, o por nostálgico.
Ricardo Arjona
El que nada constantemente en el mar ama la tierra firme.
Antón Chéjov
El entrenamiento no trata con un objeto, sino con el espíritu humano y con las emociones humanas.
Bruce Lee
Su ingenuidad y su bondad parecían convertirlo en un imán irresistible para mujeres que devoraban hombres para desayunar y después escupían los restos.
Camilla Läckberg
Siempre habrá pobres entre ustedes.
Carlos Menem
Esa sería la mejor terapia para mí.
David Guetta
Nadie llega jamás a la inmortalidad sino por el camino de la aflicción, y he aquí un gran motivo de consuelo para todo en nuestras penas.
Francisco de Sales
El suicida es el antípoda del mártir. El mártir es un hombre que se preocupa a tal punto por lo ajeno, que olvida su propia existencia. El suicida se preocupa tan poco de todo lo que no sea él mismo, que desea el aniquilamiento general.
Gilbert Keith Chesterton
La fatalidad no pesa sobre el hombre cada vez que hace algo; pero pesa sobre él, a menos que haga algo.
La poesía es poner la vida en palabras.
Homero Aridjis
El patriotismo es lo que permite a cualquier imbécil sentirse orgulloso de sí mismo por el mero hecho de haber nacido en un pueblo en el que también nació un genio.
Jaume Perich
Porque la claridad, al descender en giros de canción, enciende una alegría de mujer en el espejo gris del corazón.
José Gorostiza
Aceptaré críticas como pintor que soy, pero aquellos aceptaran que no podrán hacer una obra exactamente igual.
Juan Lobillo
Hay cosas que no tienen solución, y son las que más.
Mariano José de Larra
Los gobiernos no aprenden jamás. Las personas sí lo hacen.
Milton Friedman
Es algo que sucede cuando muere la gente: la discusión desaparece con ellos, y personas tan llenas de defectos mientras respiraban que a veces eran casi insoportables ahora se muestran de la manera más encantadora, y lo que menos te gustaba anteayer se convierte, en la limusina detrás del coche fúnebre, en una causa no sólo de regocijo solidario sino incluso de admiración.
Philip Roth