Dejar de culpar a los demás es el primer paso para ser adulto.
Renny Yagosesky
Cuando agitas tu cendal, sueño eterno de Martí, tal emoción siento en mí, ¡que indago al celeste velo si en ti se prolonga el cielo o el cielo surge de ti!
Agustín Acosta
Éntrese que le hace daño el sereno y después le da un chiflón.
Andrés López
La cortesía es cosa excelente, pero con eso no se paga una cuenta.
Charles Spurgeon
El que no sabe nada no duda de nada.
George Herbert
Decirle a un pintor que la naturaleza debe ser captada tal como ella es, equivale a decirle a un pianista que puede sentarse sobre el piano.
James Whistler
¡Ay, amor! Cuando tú te has adueñado de nosotros, muy bien podemos decir: Adiós, prudencia.
Jean de La Fontaine
Sin educación, no podemos ver más allá de nosotros mismos ni de nuestro ambiente cerrado a la realidad de la interdependencia mundial. Sin la educación no podemos darnos cuenta de cómo la gente de otras razas y religiones comparte los mismos sueños, las mismas esperanzas. Sin educación, no podemos reconocer la universalidad de las metas y ambiciones humanas.
Kofi Annan
La ciencia instrumental o de las máquinas, es nobilísima, y útil más que todas las otras; por su mediación todos los cuerpos animados, capaces de movimiento, realizan sus operaciones. Esos movimientos nacen del centro de gravedad colocado entre pesos desiguales, y estos cuerpos poseen pobreza o riqueza de músculos y palancas y contrapalancas.
Leonardo da Vinci
Ya no canto, madre, y si canto yo, muy tristes endechas mis canciones son; porque el que se fue, con lo que llevó, se dejó el silencio, y llevó la voz.
Luis de Góngora
En el gran Buda la ausencia de entrañas. ¡Ah! Que frescor.
Masaoka Shiki
No confiando en la amistad de hombre alguno, no pudo reconocer a un enemigo cuando éste realmente se presentó.
Nathaniel Hawthorne
¿Estás mal por Ava? es mejor que estés mal por ti.
Oscar Isaac
Agradezco que me consideren sexy.
Pilar Rubio
El gran regalo de la vida es en quién te conviertes mientras persigues tus metas.
Raimon Samsó
Uno de los problemas fundamentales de las organizaciones (entre ellas las familias) consiste en que las personas no están comprometidas con las determinaciones de otras personas para con sus vidas. Simplemente no las compran. No son accionistas morales de la empresa.
Stephen Covey