Pensar es un trabajo duro. Uno no puede soportar las cargas y las ideas al mismo tiempo.
Remy de Gourmont
Ahora que no estoy de moda, mis libros se leen más que antes.
Alain Robbe-Grillet
En la sociedad no todo se sabe, pero todo se dice.
Anatole France
El nuevo monarca pondrá, pues, su máximo empeño en dictar nuevas leyes y en reforzar, a su conveniencia, los derechos del Estado y someter al pueblo, de forma que no le resulte tan fácil quitar a los reyes su dignidad como dársela.
Baruch Spinoza
Nacimos indios, esclavos del cura, esclavos del gobernador, esclavos del cacique, esclavos de todos los que agarran la vara del mandón...
Clorinda Matto de Turner
Sin no conoces todavía la vida, ¿cómo puede ser posible conocer la muerte?
Confucio
Cinco grandes enemigos de la humanidad están dentro de nosotros mismos: la avaricia, la ambición, la envidia, la ira y el orgullo. Si nos despojamos de ellos, gozaremos de la más completa paz.
Francesco Petrarca
Tenemos más fuerza que voluntad, y a menudo para disculparnos a nosotros mismos suponemos que las cosas son imposibles.
François de La Rochefoucauld
Los seres humanos viven en un mundo real. Sin embargo, no operamos directa o inmediatamente sobre ese mundo, sino que operamos con un mapa o con una serie de mapas o modelos que usamos para guiar nuestro comportamiento.
John Grinder
Un país habrá llegado al máximo de su civismo cuando en él se puedan celebrar los partidos de fútbol sin árbitros.
José Luis Coll
He dicho alguna vez, con escándalo acaso de ciertos pedantes, que la verdadera universidad popular española han sido el café y la plaza pública.
Miguel de Unamuno
Las necedades del mundo son precisamente las que confunden siempre su sabiduría.
Oliver Wendell Holmes
Para mí, el premio es estar nominado para los Oscar en categorías de las llamadas importantes. Es insólito, es histórico, con lo cual siento una enorme emoción que quiero compartir con todo el mundo. Después, lo de marzo... pues será
Pedro Almodóvar
El silencio es una de las manifestaciones más profundas del alma.
Salvador Elizondo
Pero es preciso tener una refinadísima habilidad para saber sacar partido de un aire atolondrado; y quien lo posee puede obtener muchísimo por ese medio. Yo me he servido de eso muchas veces para engañar a algunas muchachas.
Søren Kierkegaard
Dícese que la lengua de los moribundos reclama nuestra atención como una intensa armonía: cuando quedan ya pocas palabras, no suelen gastarse en vano, y los que alientan sus palabras con dolores, hablan siempre la verdad.
William Shakespeare