Frase de Raymond Carver

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Creemos adivinar los sentimientos del otro, no podemos, por supuesto, nunca podremos. No tiene importancia. En realidad es la ternura... - Raymond Carver

Creemos adivinar los sentimientos del otro, no podemos, por supuesto, nunca podremos. No tiene importancia. En realidad es la ternura la que me interesa. Ése es el don que me conmueve, que me sostiene, esta mañana, igual que todas las mañanas.

Raymond Carver

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Explorar Frases

En las cosas necesarias, la unidad; en las dudosas, la libertad; y en todas, la caridad.

Agustín de Hipona

Nuestros estados modernos se preparan para la guerra sin saber siquiera el futuro enemigo.

Alfred Adler

Cuando un diplomático dice sí, quiere decir quizá. Cuando dice quizá, quiere decir no; y si dice no, no es diplomático.

Anónimo

Hay dos formas de ejercer la fuerza: una es hacia abajo, la otro tirando.

Booker T. Washington

Todo trabajo lleva en sí mismo su misteriosa recompensa.

Charles Van Lerberghe

Estableced el orden: el hábito se encargará de mantenerlo.

Duque de Levis

Siempre estoy muy ocupada. La ley puede tomar posesión de tu vida.

Emma Thompson

Esto es otra cosa que precisa acabar en el Brasil, esa mentalidad atrasada de que el presidente va a pasear. Tenga paciencia.

Fernando Henrique Cardoso

Una frase burlona ha decidido en ocasiones la suerte de más de una amistad y tal vez, más de un reino.

Jeremy Bentham

La disciplina sólo puede edificar muros a nuestro alrededor; es siempre exclusiva, y siempre provocadora de conflictos. La disciplina no conduce a la comprensión, porque a la comprensión se llega mediante la observación, mediante el estudio, sin prejuicios de ninguna especie.

Jiddu Krishnamurti

Hasta cuando podemos cerrar los ojos, los debemos mantener abiertos...

José Saramago

Llamamos prudencia a la seguridad y a la flojera. Llamamos prudencia al no comprometerse, al no arriesgar nada personal.

Luís Espinal Camps

Me gusta la vida. Tengo algunos problemas con mi vida, pero la vida es la mejor cosa que hay.

Neil Simón

Si Atenas te parece grande considera entonces que sus glorias fueron alcanzadas por hombres valientes, y por hombres que aprendieron sus deberes.

Pericles

Lo que me falta es compasión, perdón y piedad, no raciocinio.

Uma Thurman